El Tri le repite la historia a Estados Unidos en el Azteca

El Temo (Chicago Fire) y el Tri vencieron 2-1 a Ricardo Clark (Houston Dynamo) y EE. UU.

La selección mexicana de futbol sufrió demás para conseguir tres puntos de oro sobre Estados Unidos, y con un agónico 2-1 en el Estadio Azteca, el elenco Tricolor se mantiene más vivo que nunca en el hexagonal final de la CONCACAF.


La segunda vuelta de las eliminatorias rumbo a Sudáfrica 2010 dio inicio en la ciudad de México, donde el cuadro mexicano presumía un récord histórico de imbatibilidad ante el conjunto de las barras y las estrellas, con 22 victorias un solo empate en 1997 en el Coloso de Santa Úrsula.


Javier Aguirre sabía que la localía implicaba un agobio a los visitantes con la contaminación del DF a las 4 p.m. ET, -horario oficial para el silbatazo inicial-, la altura de más de 2 mil metros sobre el nivel del mar y el factor del jugador número 12: la afición.


La respuesta de EE. UU. fue llegar a la capital mexicana a menos de 24 horas de que arrancara el encuentro, pero de poco le sirvió, ya que en los minutos finales, la delantera norteamericana ya estaba fundida ante el gran esfuerzo.


Cuauhtémoc Blanco, estrella del Chicago Fire de la MLS, saltó al campo de juego como el capitán del cuadro mexicano. Con todo y que llevaba dos juegos en menos de una semana sobre sus espaldas, la final de SuperLiga y derrota por 3-2 ante Houston en la liga estadounidense, el "Vasco" le dio confianza total al "10" verde, quien no dejó de luchar jamás frente a los vecinos del área.


Apenas había corrido un minuto de juego y Andrés Guardado sacó un tiro raso que encendió el ánimo en la tribuna. Un disparo de Giovani que salió chorreado mantuvo en alerta a la zaga norteamericana, pero llegó un gran gol de Charlie Davies que enmudeció a todo el Azteca de manera repentina.


Landon Donovan recibió un balón a mediocampo, a los 8', observó el pique de Davies por costado derecho, aprovechando que Efraín Juárez quedó colgado y le dio un pase de primer nivel a Charlie. Guillermo Ochoa buscó achicar el ángulo, pero no alcanzó a tapar el potente disparo del "9", quien celebró el primer tanto de la tarde.


La incredulidad se hizo presente en el inmueble mexicano, nadie podía imaginar que Estados Unidos tenía la posibilidad de conseguir su primer triunfo en el Estadio Azteca, proeza que solamente había logrado Costa Rica, el 16 de junio de 2001.


Con el nerviosismo a flor de piel, Aguirre, vestido impecablemente con traje y corbata, comenzaba a dar voces para comenzar la remontada. En el otro banquillo, Bradley, con ropa informal, sonría levemente con el 0-1.


Mientras Efraín Juárez y Guardado volvieron a buscar las bandas, Cuauhtémoc tomó la manija del partido dándole sentido al juego mexicano. De hecho, en un pase en corto de Blanco a su contención Israel Castro nació el empate.


Apenas 10 minutos le duró el gusto a Estados Unidos de irse al frente en el tanteador.


Castro se animó a disparar a lo lejos y puso el balón lejos del alcance de Howard, quien voló para la foto. La pelota pegó primero en el travesaño y picó adentro del marco norteamericano. El 1-1 fue gritado al unísono por todo el Azteca y el juego volvió a tornarse equilibrado, tal como al principio.


La presión entonces la adquirieron los estadounidenses, que ya no pudieron controlar las llegadas de los integrantes del elenco Tricolor y utilizaron la fuerza para detener a los mexicanos.


En 3 minutos, Oguchi Onyewu (25') y Jay DeMerit (28') fueron amonestados, y a los 45', Carlos Bocanegra también fue pintado de amarillo. Las ventajas ya eran para los pupilos de Aguirre, que continuaron presionado en todo el segundo tiempo.


A los 58', a Giovani Dos Santos se le presentó una gran oportunidad. El jugador del Tottenham recibió un pase desde la banda de Guardado, bajó el balón dentro del área penal del visitante, y tardó en controlarlo. Cuando se decidió a disparar, Howard achicó de excelente forma y evitó el gol cantado.


Para entonces, Bradley ya había metido a Stuart Holden y Benny Feilhaber para refrescar el medio campo y aguantó un poco más la agonía del cuadro visitante. México respondió con los ingresos de Carlos Vela, Nery Castillo y el letal Miguel Sabah.


A nueve minutos del final, un desborde de Efraín Juárez por la banda derecha le abrió el camino al Tri para el triunfo. El jugador de Pumas llegó a línea de fondo y le entregó la pelota a Sabah; el caribeño no lo pensó dos veces y fusiló a Tim Howard para poner el 2-1 final, que le sirve al cuadro mexicano como bocanada de oxígeno puro.


Las posibilidades mexicanas de ir a la Copa del Mundo Sudáfrica 2010 siguen intactas con los tres puntos obtenidos en casa, ahora, el siguiente rival será Costa Rica, actual líder de la hexagonal.


Abel Reyes Díaz, investigador de contenidos editoriales deportivos, ha trabajado también en Editorial Televisa como Editor en Jefe y copywriter de Fox Sports México, así como en el Periódico Reforma y Grupo Radio Centro; colabora a la vez con sus artículos en FutbolMLS.com.