El Fire trabaja con la frente en alto

El sol no se puede tapar con un dedo. A lo largo de la semana, jugadores, fanáticos, cuerpo técnico y directivos del Chicago Fire tratan de dejar a un lado los sentimientos de amargura y decepción que han surgido a raiz de los últimos resultados del equipo de la Ciudad de los Vientos.


La derrota humillante del equipo rojo el sábado pasado a manos del MetroStars de Nueva York dejó preocupados a todos en el interior del plantel escarlata. Jugadores y cuerpo técnico trabajan intensamente con el objetivo de encontrar soluciones a la "minicrisis" deportiva que vive el equipo rojo.
El asistente técnico del Fire Dennis Hamlett -como muchos de los miembros del equipo- es autocrítico con la situación: "el sábado tuvimos un día malísimo. No hubo mentalidad ni concentración en el grupo. El equipo no está bien en la parte ofensiva y los jugadores no están en la misma página. Los delanteros no están consiguiendo balones claros para marcar goles y en la defensa tampoco están saliendo bien las cosas".
Para Hamlett, la concentración es la palabra clave para solucionar los problemas defensivos del equipo ya que la pasada derrota es producto de las desatenciones del Fire. No obstante, Hamlett dio crédito al equipo rival que creo las oportunidades y supo meter la pelota en tres ocasiones. "Fue el peor partido que hemos jugado. No estuvimos concentrados mientras que el MetroStars sí lo hizo y por eso perdimos. Todos admitimos esa culpa y por eso debemos trabajar atentamente esta semana antes del próximo partido".
El Chicago Fire descansó el lunes y desde el martes se viene preparando con miras a su enfrentamiento contra los Rapids de Colorado el 21 de mayo en el Soldier Field.
"Lo fundamental es trabajar esta semana en el aspecto ofensivo, pues sabemos de la necesidad de meter goles. Atrás en la defensa, debemos diseñar jugadas y movimientos que nos permitan controlar el ataque de los contrarios", enfatizó el asistente técnico de Dave Sarachan.
El plantel en su totalidad es consciente de que obtener los tres puntos contra los Rapids es la única forma de enderezar la marcha en la temporada 2005 de la MLS. "Los resultados de los dos últimos encuentros en casa son casos fuera de lo normal, queremos recuperar la confianza de nuestro público".
Pese a que levantar el ánimo de todos ha sido parte de la tareas diarias de la semana, el asistente costarricense reconoce que el equipo está presionado. "Perder por tres a cero en casa deja cosas para aprender, pero sobre todo un muy mal sabor de boca. Así es el fútbol. Cada entrenador y cada jugador desean que el equipo juegue al mismo nivel todos los partidos, pero hay juegos donde van a faltar muchas cosas. No sé por qué ahora en casa estamos jugando mal".
Finalmente el técnico auxiliar costarricense dijo que "la afición debe seguir apoyándonos, pues es muy importante ahora que el equipo pasa por una situación algo difícil. Hay que tener confianza en nuestro grupo y seguiremos haciendo las cosas lo mejor posible para mejorar el nivel de juego. La motivación que nos den los fanáticos será fundamental en este momento".
Diego F. Giraldo es redactor del periódico El Imparcial de Chicago, ha sido columnista de deportes del diario Hoy de Chicago, y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.