Bruce Arena mantiene su línea

Bruce Arena se distingue por ser un técnico de fútbol parco en sus declaraciones a la prensa, pero esta semana, en el 8vo Simposio de Fútbol de Primera, el seleccionador nacional de Estados Unidos hizo las delicias de los colegas reporteros y gente importante del fútbol que se dio cita en un hotel angelino, con algunas perlas que ya recorrieron el mundo.


Destaca su observación en torno a los procedimientos de la FIFA para identificar a las selecciones nacionales catalogadas como 'cabeza de serie', en el sorteo de grupos para las finales de la Copa Mundial de Alemania.
Tradicionalmente, se eligen a aquellos representativos nacionales, los sospechosos de siempre, que lucen entre sus pergaminos, títulos de campeón mundial, la subjetiva denominación de "potencia", así como una respetable ubicación en la siempre discutida clasificación mensual que nos entrega la propia FIFA, gracias -o poniendo como pretexto- al patrocinio de famosa bebida gaseosa.
Ley no escrita es el tema de los representantes de países que enarbolan las banderas de zonas geográficas, políticas y económicas del mundo que resultan singularmente atractivas para la buena marcha, comercial, televisiva y hasta futbolística, de una justa mundialista y que, en consecuencia, también reciben ciertas consideraciones, incluyendo la de aparecer como 'cabezas de serie', una distinción que reciben los seleccionados colocados en la primera casilla de cada uno de los grupos.
Bueno, pues contra todas esas leyes escritas y las que no lo están, se lanzó Bruce Arena, sugiriendo que si acaso la CONCACAF tuviese asignado uno de esos privilegiados casilleros, ese debería recaer en la selección de Estados Unidos, tomando como base los resultados y los logros de la membresía en nuestra confederación, durante el último término mundialista, es decir, a partir de la cita de Corea y Japón en 2002 y hasta nuestros días.
Más claramente, Bruce Arena está candidateando a Estados Unidos por encima de México, bajo la premisa de que en el último mundial su selección nacional dejó fuera a la mexicana, de que en los juegos eliminatorios dividieron victorias y de que el equipo de Kasey Keller y Landon Donovan finalizó en el primer lugar del proceso clasificatorio a Alemania, por encima de la oncena de Oswaldo Sánchez y Jared Borgetti.
La teoría de Bruce tiene sustento y su ecuación debería ser considerada en serio por los fiforrios. Sin embargo, la regordeta y mañosona de Doña FIFA, entre las maquinaciones que acostumbra utilizar para acomodar los grupos de una Copa Mundial, jamás ha mencionado que cada confederación reciba cierta cantidad de cabezas de grupo.
Pero ahí queda la arenga de Bruce como una piedrita en el zapato para quienes tienen la misión de sacar las bolitas de los recipientes de cristal, en la ceremonia de Leipzig, en Alemania, este fin de semana.
En otros temas que puso sobre el tapete Bruce Arena, se refirió al crucigrama que le representa el armado de la plantilla con 23 cupos para el viaje a Alemania en el próximo mes de junio.
La representación mundialista de Estados Unidos contará con entre 12 y 14 legionarios, mientras que el resto del equipo lo aportará el personal de la MLS, según las palabras del estratega.
La noticia es buena para el talento que circula en la liga doméstica, porque otros técnicos del mundo no utilizarían esa proporción de 60-40, entre jugadores internacionales y locales para integrar una delegación mundialista, y eso habla de la confianza que tiene Arena en el producto y talento local.
Aún más, otras de las características que han sido la marca de la casa durante la gestión de Bruce, que ya se acerca a los 8 años, es la de su confianza en los jóvenes, la de mantener una constante labor renovadora en las filas de la selección nacional, por ello su abanico de opciones es siempre bien amplio a la hora de elegir una oncena titular para cada compromiso.
Y manteniendo esa constante, para el campamento invernal que pone en marcha a partir del 4 de enero en Carson, California, confirma la invitación a Freddy Adú, quien podrá demostrar en el trabajo cotidiano al mando del seleccionador nacional absoluto y en un par de cotejos amistosos, sus merecimientos para aspirar a uno de los 23 lugares en la delegación mundialista.
Otro jovencito que recibe su primera convocatoria, es el portero de Chivas USA Brad Guzan, quien también tiene pocas posibilidades de aspirar a uno de los tres puestos para guardametas en la selección mundialista, debido a lo competido que está esa posición en el equipo mayor.
Bruce Arena asegura que no ha cerrado aún la puerta a nadie en la selección que disputará su quinta copa mundial consecutiva, pero aclara que ya tiene virtualmente aseguradas 17 de las 23 plazas en su plantel definitivo y eso, al menos, sigue despertando ilusiones entre los futbolistas jóvenes del país.
Rigo Cervántez es un conocido periodista con más de 20 años de experiencia, trabajando con medios de renombre como Televisa y La Opinión. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.