WASHINGTON, D.C. - D.C. United mantuvo su imbatibilidad en los últimos siete partidos con una gran exhibición de fútbol, derrotando 3-1 al Chicago Fire, en cotejo efectuado en el estadio RFK.
Los goles del encuentro llegaron cortesía de Rod Dyachenko (min. 6) y el brasileño Luciano Emilio (min. 25 y min. 51) por los locales. El también carioca Jerson Monteiro descontó para los hombres de rojo en el minuto 54.
Con el triunfo, el plantel capitalino mejoró su récord a 5-3-2, sumando 17 puntos y acomodándose en la cuarta casilla de la Conferencia Este, pasando por encima al Fire, que quedó quinta con 14 unidades.
El cuatro veces campeón de la MLS logró su quinta victoria de la campaña en sus últimos siete encuentros, extendiendo su invicto en igual número de partidos. Más importante, sin embargo, los capitalinos ahora sí demostraron sobre el terreno por qué son considerados como uno de los oncenos más temibles de la liga, en la que aspiran consagrarse pentacampeones de la MLS.
Tal y como se esperaba, el técnico Tom Soehm alineó a Devon McTavish en la zaga central ante la ausencia del suspendido Bobby Boswell, titular indiscutido en esa posicón. El estratega igualmente alineó desde el comienzo de las acciones a Dyachenko en la delantera en sustitución de Jaime Moreno, ausente por cumplir compromisos con la selección nacional de Bolivia.
Mientras muchos de los 20.161 aficionados que presenciaron el partido todavía se acomodaban en sus asientos, ambos planteles se dedicaron a descifrar el planteamiento táctico de sus rivales.
Fue el volante brasileño Fred quien en el primer avance del United penetró por la izquierda y centró el balón sin peligro aparente para la meta Matt Pickens. El portero visitante parecía tener control del esférico, pero éste se le escapó de las manos y ahí llegaba Dyachenko para rematar y marcar el primer gol del United, cuando apenas se habían jugado seis minutos del partido.
En el minuto 13, Chicago llevó su primer peligro al área del equipo local buscando el empate y se produjo un avance que fue detenido con una falta de la defensa capitalina. El tiro libre lo cobró Diego Gutiérrez de media distancia pero el United lo rechazó.
Se produjo enseguida un letal contragolpe iniciado por Bryan Namoff, quien bajó por la derecha, tocó el esférico a Luciano Emilio y éste mandó un centro muy certero que remató el argentino Christian Gómez de cabeza, un tiro cruzado que pasó muy cerca del palo lateral izquierdo de la portería de Pickens.
El Fire trataba de reaccionar y sobre los 20 minutos su mediocampista Bakary Soumare avanzó por el centro y vulneró la defensiva del United al llegar muy tarde el argentino Facundo Erpen, quien no pudo evitar la conexión de Soumare que pasó rozando el poste izquierdo de la valla custodiada por Troy Perkins.
En esa acción, se notó cierta descoordinación entre los defensores capitalinos, acostumbrados a ser comandados en ese sector por Boswell, suspendido por acumulación de tarjetas.
En la vuelta 24, hubo otro centro de Namoff - quien bajaba constantemente por la derecha en apoyo a la labor de los volantes capitalinos - pero Emilio llegó un poco adelantado y su remate de cabeza fue capturado por el cancerbero visitante.
Un minuto después, Luciano se desquitó. Christian Gómez le centró un balón con excelente precisión y ante la salida apresurada de Pickens, el brasileño llegó al balón, miró y con mucha clase levantó la bola para batir con un vistoso sombrerito la valla local, decretando el 2-0.
Chicago seguía buscando la remontada pero carecía de profundidad y los volantes apenas alcanzaban a transportar el balón hasta poco más allá de los tres cuartos de cancha en la zona de DC.
Al 41, otra vez United llevó peligro. Emilio tomó un balón y centró desde el sector izquierdo con mucha puntería hacia donde entraba su compañero Dyachenko. El delantero ruso remató muy fuerte de primera pero Pickens esta vez sí estuvo muy atento y rechazó el balón con las manos para despejar el peligro, pero el club local se lucía agrandado y no daba ninguna tregua en su intento de lograr su tercera victoria consecutiva y la quinta de la temporada, tónica con que finalizó la primera fracción que reflejaba el 2-0 en el marcador.
Luego del descanso, Chicago saltó al terreno con nuevos bríos y dispuesto a no permitir más libertades a su contrincante hasta ese momento claramente superior. Con ese fin, el técnico Dave Sarachan ingresó al volante William Oliveira por Jordan Russolillo y al delantero Jerson Monteiro por el mediocampista Floyd Franks, en un claro intento de dar mayor profundidad a su línea ofensiva.
A pesar de los cambios proactivos de Sarachan, fue el conjunto local el que se desplazaba constantemente al área del Fire. Dyachenko combinó un balón a Gómez y éste remató por la izquierda con un potente disparo que rebotó de la manos de Pickens y quedó mansamente para Emilio, quien llegaba para solamente tocar el balón y enviarlo al fondo de la red, 3-0 categórico a favor del United.
Había ambiente de goleada pero Chicago no se daba por vencido. Así fue, tres minutos después del tercer gol del DC, el recién ingresado Monteiro tomó un pase por el sector derecho y luego de deshacerse de su marcador Facundo Erpen, metió un tiro cruzado que dejó sin ninguna oportunidad a Perkins para el primer gol de Chicago que colocó las acciones a 3-1.
United quería más goles, sin embargo, y nunca especuló a jugar a la defensiva, lo que generó mucho movimiento en el mediocampo ante la necesidad del Fire de avanzar para tratar de seguir descontando. Gómez fue tocado peligrosamente en el sector medio y Soehn prefirió sustituirlo por Justin Moose.
Más tarde Sarachan ingresó a Brian Plotkin por Dasan Robinson y Soehn lo emuló, incorporando a Clyde Simms por Brian Carroll.
Emilio quería más goles y avanzó con mucho peligro por la derecha pero fue derribado en el borde del área grande por Jeff Curtin, quien de paso vio un cartón amarillo, pero el tiro libre de Ben Olsen fue muy pasado y enviado afuera por la raya final.
United atacaba y ahora sí el Fire estaba todo volcado en su área apostando sólo al contragolpe. A diez minutos del final, Emilio intentó nuevamente el tercero en su cuenta personal y metió un cañonazo que pegó del palo derecho de Chicago. Fred, muy bien colocado remató más fuerte todavía pero el balón pasó a escasos centímetros de la meta visitante.
La presión de Chicago por descontar no llevó ningún peligro a la meta custodiada por Perkins y por el contrario las últimas oportunidades de gol fueron para el United, que a pesar de no despachar su cuarto gol, dominó sin atenuantes al FIRE.
Miguel Guilarte es editor de deportes de El Tiempo Latino de Washington, D.C. y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
