La matemática incluye entre sus operaciones preferidas la regla de tres. La primera jornada de la postemporada de la MLS, sin embargo, fue marcada por la regla del uno. Los cuatro ganadores del juego de ida no pudieron pasar de obtener una diferencia de un gol que aunque no deja de ser una ventaja, deja todo para resolverse en la jornada de vuelta. La moneda aún está en el aire, porque para muchos uno podrá ser poco, y para otros, después del juego de vuelta sabrá a mucho.
New York Red Bulls no pudo con el mejor equipo de la temporada D.C. United; el FC Dallas firmó la primera parte de su venganza ante Colorado Rapids; Chicago Fire salió avante en casa ante el New England Revolution, mientras que Chivas USA, en un juego dramático terminó por salir vencedor sobre el Houston Dynamo. Los juegos fueron marcados por el drama y la contundencia.
En años anteriores, la Liguilla ha demostrado ser una caja de sorpresas, como el año anterior cuando el Galaxy (el gran ausente de este año) llegó en cuarta casilla, para luego repuntar y alzarse con el título.
Pero este año todo ha sido distinto. Se debe tomar en cuenta que están incluidos todos los equipos que han demostrado un mejor rendimiento en toda la temporada regular. Los líderes de toda la temporada, al menos en el round inicial han sido claros con sus propias pretensiones.
Lo que sí es cierto es que luego de la primera serie de partidos no hubo ninguna sorpresa. Los punteros ratificaron el porqué de su posición, pero no están del todo a salvo. Y los protagonistas, que llegan empujando en las siguientes posiciones, también dejaron en claro que no llegan con menos posibilidades.
Por si eso fuera poco, también dejó a algunos elementos con la etiqueta de héroes. El argentino Christian Gómez puso un voto más en su postulación a Jugador Más Valioso (MVP) anotando el gol del triunfo ante los Red Bulls; Francisco Palencia retornó antes de tiempo para anotar el tanto que tiene arriba en la serie al Rebaño angelino, mientras que Brad Guzan detuvo el penal a otro grande, Dwayne De Rosario, quien pudo cambiar la historia del encuentro a tres minutos del final. El "Gusano" dejó sin opciones a Bob Bradley de enviarlo nuevamente a la banca, y quiere ratificar las palabras de Bruce Arena, quien lo vio entre sus predicciones, defendiendo los tres postes de la selección de Estados Unidos.
Y también la estadística fue simple. Dos equipos locales aprovecharon su posición y dos no. A dos cuadros les tocará repetir su buena actuación en cancha ajena, mientras que a dos solamente les tocará rezar por un milagro para revertir su desventaja en terrenos poco hospitalarios.
En el renglón de los goleadores, también el resumen fue bueno. El guatemalteco Carlos Ruiz, el estadounidense Ante Razov y el argentino Gómez, nuevamente, fueron los romperredes que sus equipos necesitan y le dieron un punto a beneficio de sus equipos.
Con el inicio de la postemporada también llegaron los retos y los primeros premios a la constancia. Richard Mulrooney quiere redondear con el título, su premio al Espíritu de Superación del año, y también Bobby Boswell quisiera ceñirse la corona el mismo año en el que fue designado el Defensor del Año. Todos tienen una razón para celebrar, pero antes de los 90 minutos, muchos motivos para preocuparse.
Cristian Echeverría es reportero del diario La Opinión de Los Ángeles. Desde 1994 es reportero de fútbol y ha trabajado para varios diarios en Guatemala y El Salvador, así como para la revista Don Balón en sus ediciones de España y México y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
