FOXBOROUGH, Mass - El empate a cero entre New England Revolution y Real Salt Lake fue lo que quedó para los 16.864 aficionados que se dieron cita en el Gillette Stadium, en un partido entretenido pero sin un marcador definido después de 90 minutos de fútbol.
Desde los primeros minutos los Revs salieron en búsqueda del arco contrario. En el octavo minuto, el veloz Khano Smith corrió por la franja izquierda, venció al defensor Nikolas Besagno y centró para Taylor Twellman, quien por poco superó al portero Nick Rimando.
El despliegue de los dueños de casa era la constante en el accionar desde temprano y los Revs colocaron un cerrojo a la zaga ante los toques rápids y certeros de los monarcas.
Mehdi Ballouchy hilvanaba la mayoría de las jugadas del visitante, aunque nadie aparecía para acompañar y apoyarlo en los avances. En el minuto 18, el marroquí creó una gran oportunidad cuando dejó un balón a los pies de Alecko Eskandarian, quien maniobró entre la defensa de Michael Parkhurst y Jay Heaps, pero su disparo llegó directamente a las manos de Matt Reis.
Mientras, el esquema defensivo de Steve Nicol funcionaba a cabalidad ante los Reales. El sector medio de los Revs calaba perfectamente con la zaga, tapando todos los espacios a los monarcas, con Smith y Steve Ralston frenando las llegadas de RSL por los costados.
En el minuto 32, Twellman y Adam Cristman se complementaron en base a toques cortos y certeros en el área de Rimando, pero sin encontrar el toque final.
Las llegadas del local eran constantes y muy cercanas a abrir el marcador, pero faltó el finiquito por parte de los artilleros.
Mientras, Real Salt Lake casi sorprendió a todos cuando Freddy Adu llegó por el sector izquierdo ante la marca de James Riley, pero éste se resbaló repentinamente, dejando un espacio amplio para el atacante, pero el disparo de Adu fue deficiente.
Aunque no lograron apoderarse del balón durante largos intervalos, los monarcas igual tuvieron sus buenos momentos durante el partido. En el minuto 44, Adu llegó a la línea de los 40 metros y tiró un centro a Chris Klein, quien disparó al arco de Matt Reis de primera, pero el calvo portero estuvo atento y controló el remate.
Las acciones de la segunda fracción siguieron la tónica de los primeros 45 de juego, con los Revs manteniendo el control casi absoluto del esférico, mientras el cuadro visitante apostaba por sorprender a su rival mal parado o desatento. El partido tenía ritmo y los jugadores, particularmente los locales, tenían ganas. El único ausente era el gol.
En el minuto 62, Steve Nicol no aguantó más y colocó a Pat Noonan y Wells Thompson para obtener el tan esquivo gol.
Noonan hizo sentir su presencia de forma casi inmediata, y venció a Adu en una disputada por un balón suelto cerca del área de Rimando y tiró un centro hacia el palo derecho. Sin embargo, Klein estuvo atento y despejó la pelota, para el alivio de sus compañeros.
Ballouchy y Adu buscaban desesperadamente encontrar un espacio para hacer su juego, una labor casi imposible por la férrea defensa de los Revs que también dejó a Eskandarian sin espacios.
Las acciones eventualmente se llenarían de presión y desespero. En el minuto 82, el defensa monarca Ritchie Kotschau, sólo 30 segundos después de haber ingresado, entró desmedidamente sobre el cuerpo de Bryan Byrne y vio la cartulina roja.
Al final, ninguno de los dos equipos logró encontrar el fondo de la red. Aunque compartieron puntos, el resultado le favoreció a Real Salt Lake, que mostró mucho menos que New England en la cancha del Gillette Stadium.
Gerardo Cordero es editor de deportes del periódico El Planeta, editor de la revista Sus Deportes, co-anfitrion del programa radial Sus Deportes de 1300 AM en Boston, y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
