Hace años, cuando la aventura del fútbol en los Estados Unidos se hacia realidad y con el sueño de poner a rodar la maquinaria se cometían los primeros errores de buena fé y con el ánimo quizá de seducir "parroquianos" éramos duros críticos de ciertas medidas que atentaban contra la esencia del fútbol y que por fortuna con el paso de los años se fueron corrigiendo para que este deporte en los Estados Unidos se jugara como en el resto del planeta y con el reglamento universal. Era lo que consideramos en ese momento el nacimiento de la liga y por supuesto que en los primeros años era "el bebé", que apenas intentaba caminar en sus comienzos.
Fueron las simpáticas épocas del comisionado Douglas Logan repartiendo cristal como loco en los Partidos de las estrellas. Fue quizá la base para que sea armara luego la estructura actual de esta Liga, hoy envidiada por muchos y calificada ya como de primer mundo desde su esquema administrativo. Ahora el gran reto es llevar el primer mundo al plano deportivo y cuando la MLS entra en su cumpleaños doce parece que esta "pubertad" se avecina con muchas sanas explosiones.
No son las explosiones lógicas de la edad, cuando aparecen las flores del acne juvenil en la barbilla. No. Son las explosiones mediáticas y futbolísticas del hoy en el mundo que nos van a invitar a ver una MLS de alto vuelo y a sus equipos compitiendo ya no solo a nivel local, sino entrando por la gran carpa de las competencias internacionales. Duele un poco que en los enfrentamientos ante los mexicanos en la Copa de Campeones de CONCACAF la final sea muy Azteca, pero de la misma manera podemos tener la certeza de afirmar que en las semifinales del certamen tanto el D.C. como el Dynamo dejaron una impresión muy positiva en el ambiente futbolístico internacional y particularmente en México, en donde aun se resistían a ver el fútbol rentado de Estados Unidos con ojos de competencia.
Pero volviendo a la liga, esta MLS comenzó y bien. Sus partidos fueron particularmente muy bien vendidos a los medios y de tal manera que la liga no se concentra en una sola cadena de tele, sino que diversificó culturas y objetivos con llegada a través de diferentes sistemas. Es imposible no referirse con respeto y admiración al sistema de promoción que nos hizo en los últimos treinta días la cadena ESPN atacando con una creatividad impresionante al público que quizá aun no había querido ver el fútbol por ser lógicos pasionales de otras disciplinas mucho más arraigadas dentro de la población anglosajona.
En lo deportivo, comenzaron algo duros, quizá por la resultante lógica de la pretemporada y porque se nota la falta de ritmo en algunos jugadores. En este aparte quizá la liga deba intentar una reforma, para que no se queden inactivos por tanto tiempo muchos jugadores de la MLS. Se podría pensar en los dos torneos y por grupos como el sistema Mexicano y aprovechando que por ahora son menos equipos. Claro entendemos las necesidades de estadios y las dificultades de clima y por ello es solo una sugerencia, pero vale la pena pensar en algo que mantenga activo y más largo el calendario. Este año tendremos superliga, pero simultánea y en verano.
Estoy seguro que a este ritmo la MLS promete más en competencia. El comienzo fue bueno aunque para algunos doloroso. Perdieron el D.C., el Revolution y Toronto, una jornada con dos empates y un triunfo para las Chivas. El futuro para algunos parece pintar bien, pero es muy temprano para hacer sonar las campanas.
Ricardo Mayorga, ha sido comentarista por doce años para cadenas como Telemundo, Univision y Telefutura en Estados Unidos además de periodista sindicado de radio y columnista de periódicos como Triunfo en Atlanta, El Tiempo Latino de Washington y HOY en Nueva York, Chicago y Los Ángeles. Mayorga colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
