De terremoto a Terremotos

El arquero Brad Guzan salvo al equipo rojiblanco en varias ocasiones.

Hans Westerhof aún tenía inquietud en la voz y en el gesto. Los terremotos le asustan. Pero no los de San José, sino esos descastados que engendra la madre naturaleza.


--¿Cuál terremoto le asustó más, el de la mañana (5,6 grados en la escala de Richter] o el de la noche en la cancha?--, se le preguntó.


"Ja, ja, ja. No el de la mañana. ¿Cerca de las nueve no? Sí, de repente se movió todo. Pero ya durante el partido, ya ni me acordé de ese terremoto y me dediqué sólo a los otros terremotos", explicó sonriendo.


Los otros terremotos (los Earthquakes), esos que sacaron un empate a uno de la cancha del Home Depot Center, le dejaron una sensación de insatisfacción. "En nuestra cancha debemos ganar y estuvimos cerca de conseguirlo", comentó.


"Algunos entrenadores se habrían sentido satisfechos, porque íbamos perdiendo [0-1] y con el empate a uno, algunos podrían decir, bueno, ya está, no perdimos. Yo no, no estoy satisfecho con el empate", dijo el entrenador holandés.


Westerhof reconoció que la fortuna jugó en ambos lados, en las dos canchas, en las dos porterías y en los dos equipos. "No tuvimos suerte porque fallamos oportunidades en el primer tiempo. Mandamos en la cancha durante 40 minutos, tuvimos oportunidades de gol, dos en el partido pegaron en el travesaño, entonces ellos tuvieron suerte", explicó.


"... pero nosotros también, balones al poste, desviados y al final ese gol anulado [minuto 91 a Dwayne De Rosario]. Los dos tuvimos fortuna", dijo Westerhof.


El entrenador de Chivas USA estableció que su equipo ha mejorado, pero enfatizó que aún necesita trabajo intenso en el aspecto físico, en el manejo de las salidas con el balón dominado, en la terminación de las jugadas y en el aspecto mental de sus futbolistas.


Al terminar la sesión de entrevistas, Westerhof se acercó a sus jugadores en el vestuario en la zona de regaderas. Se dio tiempo para felicitar y bromear con Ezra Hendrickson, el anotador del gol del empate para Chivas USA.


Mientras tanto, jugadores como Armando Begines y Thiago Martins salieron con las secuelas del juego ante los Terremotos de San José, con fuertes golpes, toda vez que fue un partido áspero que al final dejó un saldo de seis amonestados, cuatro por los rojiblancos y dos por los visitantes.


Retorno feliz...


En un vestuario donde la alegría se vive con recato, había un hombre contento consigo mismo. Y ciertamente los demás estaban contentos con él. Brad Guzan había regresado la noche del sábado a la portería de Chivas USA.


Recibió su gol 18 de la temporada, pero atajó al menos cuatro correos con destinatario de red. "Creo que todos hicimos un gran esfuerzo y estoy contento de haber puesto mi parte para conseguir este empate", dijo Guzan.

"Creo que hicimos un buen partido, que dominamos la mayor parte del juego y que incluso pudimos haberlo ganado".
<strong>-- Brad Guzan</strong>

El primero en estar listo, atendió a la nube de reporteros anglosajones que lo erigieron como el héroe del encuentro. "Tuve suerte en las jugadas, estuve atento, hice lo que tenía que hacer y siempre estuvo presente el apoyo de mis compañeros", dijo Guzan tratando de repartir los méritos de un resultado trabajado, complicado, ante un adversario que no sólo se plantó bien en la cancha sino que dejó constancia de su veloz ofensiva.


"Creo que hicimos un buen partido, que dominamos la mayor parte del juego y que incluso pudimos haberlo ganado, pero ellos tuvieron mucha suerte", explicó.


Chivas USA regresa este lunes a los entrenamientos a doble sesión. Su próximo compromiso será el sábado cuando reciba a los Rapids de Colorado.


Rafael Ramos Villagrana es redactor del diario
La Opinión
de Los Ángeles, y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.