Mayorga: Un grito de independencia

Como los próceres del siglo XVIII y con su estampa justamente con moldes casi retros, el secretario general de la CONCACAF entregó una noticia que para el fútbol del área es algo así como un "grito de independencia" futbolístico. La Copa Oro del 2007 que se jugará en el verano próximo se realizará solamente con equipos de la CONCACAF y no tendrá invitados ni de Suramérica, Europa, Asia o África.


Quiso ser contundente Chuck Blazer en su anuncio y pareciera no dejar duda que no es una decisión tomada a la ligera ni mucho menos de carácter temporal, sino una determinación estudiada a fondo que busca beneficios deportivos y económicos pensando en los equipos del área que así tendrán más opción de competir en el gran evento de esta Confederación. Y está muy bien que se haga de esta manera y dando prioridad al fútbol de un sector del mundo que debe crecer con lo propio y que siente que ya es mayor para defenderse comercial y deportivamente solo y sin el apoyo de invitados que en su momento dieron realce y prestigio al torneo.


Especialmente Brasil que fue en muchas ocasiones el gran invitado, ayudó por su imagen y atractivo a convertir la Copa Oro en un evento de características más internacionales. Pero ya es hora de caminar solos y soltar la mano de las potencias en lo deportivo. Hace bien la CONCACAF en tomar esa decisión y jugársela dando más espacio a los suyos. En un momento pensamos que se había llegado allí por la coyuntural coincidencia de calendarios con la Copa América del 2007 cuyas fechas solo serán separadas por pocos días, pero no. Nada tiene que ver la Copa América con esta decisión luego de escuchar a Blazer.


El crecimiento futbolístico y deportivo de la CONCACAF permite ya realizar y jugar una Copa Oro sólo con equipos propios, entre el 6 y el 24 de junio del 2007 en ciudades de los Estados Unidos que conoceremos en unos días. Las opciones crecen y si nos remontamos a la corta historia del certamen desde 1991, nos encontramos con otra realidad imposible de ocultar. A pesar de los invitados la Copa Oro nunca fue ganada por uno de ellos y sus ocho versiones realizadas desde 1991 han sido reclamadas por equipos del área.


Cuatro veces México, tres Estados Unidos y una Canadá son el resultados de esta nueva era futbolística de un certamen que siempre tuvo como grandes invitados equipos como Brasil o Colombia y que alcanzó a tener oncenos como Corea y como Japón en cuotas políticas previas a la organización del Mundial de Oriente. Desde ahora no existirán más compromisos y las doce plazas serán ocupadas por equipos correspondientes al área.


México, Estados Unidos y Canadá ya sembrados y clasificados por la llamada zona norte del área y a ellos se sumarán cuatro selecciones que vendrán de la eliminatoria del caribe y cinco representantes que serán de las eliminatorias centroamericanas o sea de la Copa de Naciones de la UNCAF. Así de sencillo y así de fácil la repartición. Se suelta la mano de los invitados en un acuerdo que me imagino habrá sido consultado también dentro de la sana política de las Confederaciones y especialmente tratado con la CONMEBOL, porque recordemos que por el sur también se podría pensar en lo mismo y ahí si la mano sería diferente en el futuro.


Una Copa Oro muy propia suena bien, pero a México especialmente no le haría mucha gracia que la Copa América tomara la misma decisión y regresara -como debe ser- a la antigua y como todos los demás sólo con sus equipos del área.


Ricardo Mayorga, ha sido comentarista por doce años de Telemundo, Univision y Telefutura en Estados Unidos además de periodista sindicado de radio y columnista de periódicos como Triunfo en Atlanta, El Tiempo Latino de Washington y HOY en Nueva York, Chicago y Los Ángeles y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.