El Fire pone a prueba su casa

Este domingo, el Bridgeview Stadium será sometido a la prueba de fuego cuando abra sus puertas a sus inquilinos, el Chicago Fire.


Aunque la inauguración oficíal está pactada para el 25 de junio, este domingo el Chicago Fire enfrentará al equipo de New England Revolution en campo propio, privilegio del que no habían podido gozar en lo que va de la temporada 2006.


El estadio, que cuenta con capacidad para 20,000 aficionados, es el cuarto que se construye en Estados Unidos para la práctica de fútbol específicamente después de la construcción de los estadios como el Crew Stadium en Columbus, el Home Depot Center en Los Ángeles y más reciéntemente, el Pizza Hutt Park en Frisco, Texas. El diseño póstula al inmueble para pronto convertirse en una señal que identifique a la Ciudad de los Vientos como lo han hecho los estadios de los equipos profesionales de la ciudad.


Por lo pronto, el partido del domingo permite a la gerencia del Chicago Fire e inmueble, evaluar la operación del lugar y asegurarse que reune las necesidades y requisitos para albergar eventos musicales y deportivos de gran envergadura.


Tras cumplir con una desgastante gira de nueve partidos, los hombres de rojo por fin enfrentarán su primer partido en el campo prometido, la casa oficial del Chicago Fire. De esa manera concluye la gira por la cual el equipo de Chicago pasó gran parte de las ultimas diez semanas entre aeropuertos y hoteles. Esa misma travesía dejó desgaste entre los hombres de rojo que semana a semana, dejaban a sus familias en la Ciudad de los Vientos para cumplir con los compromisos.


Este jueves marcó una nueva era para el Chicago Fire, que sostuvo su primer entrenamiento en el Bridgeview Stadium. Los próximos entrenamientos, y el partido que sostendrá el domingo, servirán al equipo para reconocer el campo. Los hombres de rojo buscaran cuanto antes familiarisarce con su casa para en cada encuentro hacer sentir su condición de local en un campo que muchos equipos envidiarán y que posiblemente sirva como modelo a seguir para otros equipos que se encuentran con planes para construir su casa propia.


La constucción de otro estadio para un equipo de la MLS, demuestra la constante solidaridad de la liga y sus dirigentes así como la de los residentes y el gobierno de Bridgeview. Esto y el creciente gusto por el fútbol nos hace esperar una grata bienvenida para el equipo por parte de la afición. Al encuentro ante New England podrán asistir dueños de abonos anuales con el equipo, así como los residentes de Bridgeview.


Este suburbio se ha convertido en la casa de los que gustan del deporte y lo hace de buena manera pues es una comunidad muy hospitalaria. Lo que puede intrigar es la posilbe respuesta de la afición. Habra que tomar en cuenta que por los tiempos que vivimos donde se respira el fútbol por el mundial, esto se puede convertir en una arma de doble filo.


A los que reciden en Chicago y gozan del fútbol solo les queda esperar y ver si las expectativas en cuanto al estadio y su equipo se cumplen.


Raquel Ortiz colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.