D.C. gana su serie frente a Red Bulls

WASHINGTON, D.C. — D.C. United logró clasificar a la final de la Conferencia Esta tras empatar 1-1 contra los New York Red Bulls en el estadio RFK y hacerse con la serie de semifinales con un marcador global de 2-1.


En la capital se vivió clima de final desde el pitazo inicial. Con máxima expectativa y 21.455 almas en las graderías y mucha, pero mucha tensión.


Era a matar o morir. Uno seguía en carrera, el otro se despedia. Y los 22 protagonistas lo sintieron así. El equipo de Nueva York arrancó mejor. El empate no le servía y antes de los tres ya había metido dos pelotas paradas por medio de Amado Guevara sobre el arco defendido por Troy Perkins. Red Bull puso dos lineas de cuatro y Josmer Altidore y John Wolyniec como puntas.


Lo del D.C. esperaban con paciencia en el inicio del partido. Si hay algo que caracteriza al equipo dirigido por Peter Nowak es la paciencia y dar el golpe en el momento justo. El tetracampeón saltó al campo con el acostumbrado dibujo táctico de 3-5-2 con Jaime Moreno y Alecko Eskandarian como delanteros.


La primera de peligro fue para Red Bulls merced a un error de Joshua Gros que se la entregó de cabeza a Dema Kovalenko quien asisitió a Wolyniec pero su disparo se fue lejos. Los dirigidos por Bruce Arena ahogaron la salida del local y obligaban a Perkins y los defensas a salir con pelotazos.


Sobre los 14', un remate del capitán de los visitantes, Guevara probó una vez más a Perkins que respondió muy seguro.


D.C. no creaba peligro, se le hacía difícil salir jugando, era impreciso y no encontraba la pelota.


Tanto es así que Jaime Moreno debía bajar casi hasta la mediacancha para poder tenerla y Freddy Adu debió tirarse a uno y otro costado para generar algo de juego y "Esky" estaba totalemnte desconectado se metía una y otra vez en fuera de lugar. Mientras tanto Christian Gómez era bien controlado por Seth Stammler y el local no tenía manija ni conductor.


Pero sobre los 20' llegaba el primer aviso del tetracampeón. En la primera jugada hilvanada en equipo que inició Perkins con un gran pelotazo a Ben Olsen, y que paso por Moreno, Gros y "Gomito" terminó exigiendo al arquero Jon Conway a mandarla al córner.


Cinco minutos más tarde, la visita pudo abrir el marcador tras un centro al segundo palo en el que se quedó Facundo Erpen y por detrás apareció el austríaco Markus Schopp cuyo cabezazo fue desviado por Perkins y en el rebote Wolyniec no pudo darle.


La primera parte se fue como arrancó: con Red Bulls dueño del mediocampo y del balón, con más iniciaiva que el rival y tal vez con más merecimientos de haberse ido al descanso con la ventaja.


En la segunda parte Red Bulls fue decididamente sobre el arco rival. Con Guevara como conductor y manija, el equipo de Nueva York comenzó más incisivo, con la misma concentración de la primera etapa. D.C. por su parte, estaba perdido en el terreno, no generaba fútbol, no gravitaba en el área rival y el tremendo empuje y apoyo de afuera de la cancha de la Barra Brava parecía no contagiar al equipo capitalino.


Los ataques de los Red Bulls chocaban permanentemente contra un muy seguro arquero Perkins que con el correr de los minutos se fue convirtiendo en una de las figuras del partido.


Sobre los 60, y tras un centro atrás, Altidore la estrelló en el palo. Red Bulls llegaban una y otra vez. D.C. empezó a dar señales de vida a los 66 minutos y respondía a la ocasión del novato Altidore con un pelotazo de "Esky" en el travesaño.


Pero la insstencia del visitante tuvo premio. A los 69, tras un centro brillante de Guevara, Altidore con un cabezazo fantástico la clavó abajo ajustada al palo donde no pudo llegar Perkins. Nueva York igualaba la serie y de terminar así el partido se iba a la prórroga.


Siete minutos después, Guevara la mandó apenas sobre el travesaño. D.C. no hacía pie en defensa, había perdido el mediocampo y no llegaba con peligro. A esa altura Rod Dyachenko había entrado por "Esky" y después Nowak sacó a Adu por el argentino Matías Donnet. El volante le dio más oxígeno y fútbol a la mediacancha.


Pero todo el esfuerzo y desgaste del vistante se hizo añicos a falta de 4 minutos para el final. Gros envió un centro desde la derecha que ae paseó por todo el área y Gómez en el segundo palo la colocó suave por debajo del arquero. Gol y explosión en el RFK. Era el empate 1-1 y el pasaje del D.C. a la final de la Conferencia del Este donde ya le espera el New England Revolution.


A pesar del golpe Red Bulls no se entregó y fue a buscar la ventaja con gran amor propio. D.C. terminó contra su arco. El final fue dramático y digno de dos grandes equipos. Pero la suerte estaba echada.


Gustavo Cherquis es redactor deportivo de WZD.C. Telemundo 64 y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.