Pelé, siempre Pelé

Pelé volvió a recibir los reflectores de Hollywood como en sus mejores días de jugador del Cosmos, en alguna visita a California para enfrentar a los Aztecas de Johan Cruyiff y George Best en la antigua NASL.


Pero en esta oportunidad "O'rei" sí vino a pasearse entre las luminarias de la meca del cine con motivo de la presentación de 'Pelé Eterno', un documental que repasa las hazañas del máximo futbolista que haya conocido la humanidad.
Fue el Pelé de siempre. El de los más de 1.200 goles, de los cuales, se pueden disfrutar casi mil, en un desfile inagotable por la pantalla, con la narrativa del propio Edson Arantes do Nascimento y los testimonios de quienes lo acompañaron en el Santos, con la selección brasileña y el Cosmos de Nueva York, o de quienes lo sufrieron en carne propia, como rival ocasional en alguna cancha del mundo.
Pelé fue el mismo de siempre también fuera del celuloide. Amable, accesible y dispuesto a atender a todos con una sonrisa de niño.
Y qué suerte para quienes hemos vivido en esta época del fútbol, de la vida y de los festivales de cine que ofrecen documentos como el de 'Pelé Eterno' que nos transporta a los años románticos del fútbol y que permite constatar a aquellos que tenían alguna duda o quienes no pudieron ver las hazañas de Pelé, quien es el verdadero rey del fútbol.
El tricampeón mundial con la verde-amarilla brilló y vivió en una época distinta del fútbol y de la humanidad.
El balompié era de más técnica que físico, de ritmo menos intenso, con mayores espacios para jugar y existía todavía el amor por los colores de una camiseta antes que la adoración al color verde del dólar.
Asímismo, los hechos trascendentes, del fútbol y del resto de nuestras vidas, trascendían ménos por las condiciones que guardaban los sistemas de comunicación.
Ya en el siglo XXI, el vértigo de lo intrascendente parece predominar sobre los verdaderos valores y en la cancha, un leñador con ganas de correr y bien entrenado, es figura.
O como lo dijera Carlos Salvador Bilardo, técnico campeón del mundo con Argentina en 1986: "Hoy en día, si un futbolista es capaz de recibir y controlar un balón, vale 10 millones de dólares. Si además, puede dar un pase, se cotiza en 20 millones y si encima logra anotar por ahí un gol, Europa lo compra en 30 millones".
Pero lo de Pelé traspasa los tiempos, las épocas y las diferentes caras del fútbol. Además, si sus goles, sus conquistas y títulos no tuvieron en su momento la repercución correspondiente por la inexistencia de internet o de televisión satelital, sus hazañas logran perpetuarse gracias al documental: "un legado para las nuevas generaciones", como lo asegura a este columnista el propio ex-jugador, quien llegó para unirse a una aventura llamada North American Soccer League, a finales de la década de los setenta, convencido de que el fútbol, nuestro fútbol, podía establecerse en el hostil territorio estadounidense.
Treinta años más tarde, el fútbol profesional sigue abriéndose paso en Estados Unidos, con una liga diferente, con un modelo económico diferente y en un mundo muy distinto, pero con la misma sabía que algún día llegara a depositar en este territorio el grán Pelé, convertido en el gran embajador y promotor del balompié en Estados Unidos.
Y por el carisma que aún tiene, por el imán mediático y popular de su nombre y personalidad, la Major League Soccer debería considerar a "O'rei" para sus campañas promocionales, más allá de esos anuncios comerciales junto a Freddy Adú.
También se debe considerar su conocimiento profundo del fútbol para tenerlo como asesor o consultor.
Por ejemplo, saber qué opinión le merece a Pelé, que tantos títulos logró con el Santos, en torneos locales, en la Libertadores y la misma Copa Intercontinantal, el formato que utiliza la MLS para decidir a su campeón, donde Galaxy y Revolution se disputan la Copa MLS en un solo juego, que tiene como sede a la neutral en el 2005 a Frisco, Texas.
Rigo Cervántez es un conocido periodista con más de 20 años de experiencia, trabajando con medios de renombre como Televisa y La Opinión. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.