Muchos de nosotros acudimos a los eventos deportivos para animar a nuestro equipo preferido, para ser entretenidos y a veces para ser maravillados. Queremos salir del estadio con un "¡Oh!" en la boca.
¡Oh! ¡Qué partido!
¡Oh! ¡qué remontada!
¡Oh! ¡Qué golazo!
Probablemente esto no suceda con tanta frecuencia como nos gustaría, pero cuando sucede, nos alegra saber que hemos presenciado algo especial o incluso histórico.
La estrella del Real Salt Lake Clint Mathis nos ha ofrecido tres de estos momentos históricos en la MLS. De hecho, él fue responsable no de uno, ni dos,sino tres grandísimas actuaciones individuales en el transcurso de ocho meses y dos temporadas con los MetroStars en 2000 y 2001.
La mayoría de los jugadores tardarían toda una carrera, pero Mathis:
Ha logrado anotar cinco goles en un partido.
Consiguió aquel increíble gol desde más de 55 metros.
Y nos deleitó con el díficel de alcanzar "hat trick supremo". Tres goles, uno con cada pierna y otro con la cabeza.
"No sé si volverá a ocurrir", dijo Mathis. "Nunca creí que pudiera pasar. La verdad es que sí puede ocurrir de nuevo, pero las probabilidades son mínimas".
Jason Kreis, ahora compañero de Mathis en el Real, fue testigo de primera mano de dos de estos célebres momentos.
"Durante ese período de tiempo, me convertí en un admirador más de Clint", dijo Kreis. "Él estaba jugando de forma increible. Creo que él y yo somos jugadores similares. Fue divertido estar presente en el estadio y ver lo que él estaba consiguiendo".
Nadie estaba disfrutando tanto como Mathis, quien llegaba al Cotton Bowl de Dallas Burn el 26 de agosto, 2000 con 11 goles y 14 asistencias.
Mathis dijo que su primer disparo en ese partido acabó en la fila 14 del graderío.Los cinco siguientes acabaron acertando en la diana, en el minuto 3', 26', 40', 68', y 83'.
Mathis se refiere a esto como su logro Nº 1 en la MLS. Al fin y al cabo, varios jugadores han anotado cuatro goles en un sólo partido en la MLS, pero tan sólo él ha logrado cinco.
"Era algo que nadie había logrado nunca", dijo Mathis, quien nos confesó que no había logrado cinco goles ni siquiera en un artido de juvenil. "Parecía que todo lo que remataba acababa en gol. Quizás estuviera en el sitio adecuado en el momento adecuado. Me sentí un poco extraño al marcar tantos goles".
Fue extraño en varios aspectos.
"Ya era extraño el acabar la primera parte con un 'hat trick' (tres goles)", dijo Mathis. "Me sentía raro. Estaba riéndome allí sentado en el vestuario. Después salimos, y en seguida me enfadé y volví a tomar intensidad. Tiramos una ventaja de 1 a 3 y estábamos perdiendo 4-3. Fueron altibajos, pero fuimos capaces de lograr un gol y después otro.
"En ese momento era más importante el lograr la victoria. Simplemente lanzaban un saque de esquina y yo estaba ahí para rematar".
"Fue uno de esos días en los que tenía que ocurrir así. No se puede planear que tu equipo marque seis goles, que tú logres cinco de ellos y que tu equipo acabe ganando 6-4".
Con el marcador 4-4 en el minuto 83, se señaló un penalti a favor de los MetroStars. Adolfo Valencia era el encargado de lanzar los penaltis, pero el capitán Tab Ramos, dándose cuenta del momento histórico, le pidió al colombiano si le podía dejar a Mathis ser el encargado de lanzarlo. Él no puso reparos ni tampoco Mathis, que logró batir al portero Matt Jordan.
"Cuando ya llevas cuatro goles, más vale que lo lances", dijo Mathis. "Mira a Jason Kreis ahora. Si yo fuese el encargado de lanzar los penaltis, y él lleva 99 goles y ese penal significaría el gol número 100 de su carrera, por supuesto que le dejaría lanzarlo".
Los 12.940 aficionados presentes no se alegraron con el quinto.
"La hinchada empezó a silbar, así que simplemente alcé los brazos con los cinco dedos abiertos en cada mano. No sé si estaban protestando por el penalti o se dirigían a mí. Creía que me silbaban a mí", dijo entre risas.
Kreis, el máximo goleador de la MLS, comprendía lo que había ocurrido.
"Fue una noche mágica para Mathis", dijo. "El balón se acercaba a él esa noche. ...Su finalización de las jugadas fue absolutamente magistral".
Un dato interesante: Irónicamente, Mathis no lograría ni un solo gol, ni una sola asistencia más en los tres últimos partidos de la temporada regular de los Metros, Mathis finalizó la temporada con 16 goles y 14 asistencias.
Mathis tendría que esperar ocho meses más para poder deslumbrrnos otra vez.
En marzo, un lanzamiento de falta directa de Mathis le había dado la victoria a EE.UU. por 1-2 frente a Honduras, la primera victoria de la selección nacional como visitante en territorio centroamericano en un partido clasificatorio para un Mundial en más de 11 años.
Dejemos que sea el proio Mathis quien nos relate uno de los mejores goles que ha visto la MLS y que tuvo lugar en el minuto 60 cuando MetroStars ya ganaba por 2-0:
"La situación comenzó con la expulsión de un jugador. Estábamos defendiendo un saque de esquina. El baón sale despejado y yo lo controlo en la frontal del área. Estaba buscando pasar el balón rápidamente hacia adelante, pero no había nadie, por la expulsión de uno de nuestros delanteros. Decidí quedarme con el balón y comenzar a regatear. porque estábamos bajo mucha presión.
"Fui capaz de deshacerme del primer jugador, y otro se lanzó al ras del suelo, pero yo seguí corriendo. Había otro jugador que estaba regresando. Al final logré girarme hacia la derecha y tirar al palo corto. Si hubiese planeado toda la jugada, no hubiese sido posible el correr tan lejos ni tampoco el marcar gol. Con tres defensas por delante de mí, nunca se me hubiese ocurrido.
"Ocurrió instintivamente, mantuve el control del balón, comencé a regatear y logré marcar gol. Curar ese tipo de goles."
Para que conste en acta, Mathis se fue de Ryan Suárez y Jorge Rodríguez antes de batir a Jordan desde la frontal del área. "Ese partido", comentó Kreis entre risas, "estuvo muy mal defendido sobretodo en esa jugada que él hizo. Pero al final, fue algo extremadamente positivo que realizase ese contraataque y marcase el gol tal y como lo hizo".
Tan sólo cuatro días más tarde, el 2 de mayo en el Estadio de los Gigantes, Mathis atacaba de nuevo, logrando ese famoso hat trick contra los vigentes campeones, Kansas City Wizards, en la victoria por 4-1.
"No creo que este sea comparable con los otros dos, por lo menos en mis libros. No lo recuerdo como algo mu yespecial. Estoy acostumbrado a usar ambas piernas. Ahora que lo dices, no creo que se vea eso tan a menudo", comentó.
"El primer gol fue un lanzamiento de falta directa," dijo. "Le pegué en el lateral del balón, y fui capaz de mantener la trayectoria rasa y entró por un lado de Tony Meola. El segundo fue con la pierna izquierda. Regatee por unos 18 metros sobre la frontal del área, y con la pierna izquierda la mandé al mismo lugar que había lanzado la falta. El tercero llegó de cabeza".
Aun así Mathis no quiere comparar este hat trick con lpos otros dos logros.
Mathis se refiere al gol contra los Dallas Burn como su mejor gol en la MLS.
¿Su gol más memorable de todos? Su gol en el empate a 1-1 contra Corea del Sur en el Mundial de 2002.
"Eso era algo con lo que he soñado siempre," dijo. "No importa lo que escriban o lo que digan sobre mí. Siempre tendré ese momento para recordar. La satisfacción de saber que he conseguido cosas importantes y logrado momentos en los que la gente salió diciendo "¡oh!". Eso me hace sentir muy bien".
"Eso es lo que se supone qeu debemos hacer como deportisgtas. Entretener. La gente no acude a los partidos simplemente por ir. Quieren ver algo que ellos no son capaces de hacer. Por eso yo veo básquetbol o golf y viceversa; la gente corriente con empleos de 9 a 5 no tienen la capacidad atlética de realizar este tipo de codsas. Por eso acuden a los estadios para verlas".
Michael Lewis escribe para el New York Daily News y es editor de BigAppleSoccer.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
