Con un insólito marcador final de seis a dos, D.C. United venció a MetroStars que jugó su peor partido en lo que va del torneo. El encuentro arrancó con un conjunto visitante bien parado en el terreno de juego, que se puso en ganancia cuando apenas corría el primer cuarto de hora y daba la sensación que tendría una tarde feliz. Bob Bradley puso en la cancha la mejor formación que disponía, reforzando a la defensa con el ingreso de Tim Regan marcando punta izquierda y la presencia de Ricardo Clark, jugando como volante tapón. Arriba era justicia la presencia de Mike Magee en función de su rendimiento de los encuentros anteriores y el argentino Sergio Galván Rey volvía a tener su oportunidad de ingresar como titular.
Del otro lado, tres hombres en el fondo, Bryan Namoff, Ryan Nelsen y Mike Petke, tres volantes, Brian Carroll, Dema Kovalenko y Ben Olsen y dos carrileros, Earnie Stewart por derecha y Bobby Convey por la izquierda para que Jaime Moreno y Alecko Eskandarian fueran los dos puntas del conjunto local. D.C. United se vio sorprendido en esos primeros minutos y le costó irse acomodando en la cancha. Pero bastó con que en un descuido de los centrales de MetroStars Nelsen marcara el empate para que el visitante comenzara a bajar sorprendentemente su rendimiento. Para colmo de males llegó una desafortunada jugada del arquero Walker, que intentó eludir a Jaime Moreno, éste le quito el balón y marcó el segundo.
De allí en más fue un monólogo capitalino. El conjunto de Nowak se adueño del balón y del terreno y sucesivamente fue marcando goles a lo largo de todo el compromiso. MetroStars no atinaba a nada e irremediablemente cometía faltas que lo condenaban a una derrota que pudo incluso ser más amplia. A la cita faltaron jugadores de talento como Gaven, solo con apariciones muy esporádicas y Amado Guevara, perdido ante la marca de los muchos jugadores que el rival puso en ese sector. Los del medio no bajaban y los defensas no pudieron nunca ni con el ataque masivo del D.C. United y muchos menos cuando de contragolpe lo agarró siempre mal parado al equipo de Bradley.
Se perdió un partido más, pero no el campeonato. Bradley tiene el panorama bien claro. Es seguro que encontrará el camino definiendo quienes son los once mejor dotados y encarar con ellos el resto del año. MetroStars tiene un buen plantel y cuenta con individualidades de jerarquía que deben retomar su mejor fútbol.
