Voraz incendio del Fire consume Nueva York

Chicago apabulló a los Red Bulls en el Giants Stadium por un contundente 5-1, goleada que, además de humillar a su ex entrenador Juan Carlos Osorio frente a su nueva hinchada, volvió a catapultar al cuadro rojo a la cima de la Conferencia Este y de la tabla general.


Chad Barrett (2), Cuauhtémoc Blanco, Chris Rolfe y Gonzalo Segares anotaron los goles del Fire, mientras que Jozy Altidore, con la destino taurino ya sentenciado, logró el tanto del honor para los dueños de casa.


Salvo un breve lapso cerca del final de la primera mitad, Chicago dominó el encuentro a su antojo, reflejando esta supremacía con un control casi exclusivo del esférico. El Temo, Rolfe y Justin Mapp, quien causó estragos por la franja izquierda, se asociaron en múltiples ocasiones, hilvanando pases cortos y concisos que pusieron contra las cuerdas a la defensa local desde el primer minuto.


Unos pocos segundos después de elevar su primer remate, tras buena asistencia de Mapp, sobre el travesaño de Jon Conway, el delantero Chad Barrett recibió un pase al vacío de Blanco y superó en velocidad a Hunter Freeman, quien le facilitó la tarea al atacante visitante al adelantar la pelota en su intento por alcanzarlo, para luego definir con tranquilidad frente a Conway. Corría el minuto ocho y el Fire se había puesto en ventaja.


Si bien el marcador final rayó en lo escandaloso, pudo haber sido aun peor si los artilleros rojos no hubieran perdonado tanto. En dos ocasions, Barrett erró oportunidades para abultar la ventaja, la segunda vez desde 15 yardas.


Además, el árbitro Ricardo Salazar, de cuestionable labor la tarde del domingo, se hizo el desentendido cuando el defensor Jeff Parke derribó a Blanco dentro el área taurina, un penal claro que sencillamente no se cobró, quizás para castigar los supuestos "piscinazos" del Águila de Fuego.


Lentamente, Nueva York empezó a crear los espacios necesarios para llegar con peligro a la zona de Chicago, casi siempre a través de Dane Richards, lejos el elemento más desequilibrante de los locales.


En uno de sus desbordes por la franja derecha, el jamaicano avanzó con pelota dominada hasta la línea de fondo y mandó un centro al corazón del área para Claudio Reyna, pero el cabezazo del volante salió muy cruzado y elevado.


Los Red Bulls casi lograron emparejar las acciones poco antes del descanso con sendos remates de Parke (cabezazo) y Danleigh Borman (zapatazo) que se fueron apenas desviados sobre la madera.


Ya en la segunda mitad, Chicago dejó de perdonar y se lanzó con todo contra los dueños de casa. Instantes después del reinicio, Bakary Soumare envió un pelotazo al costado derecho para que Blanco dejara en el camino a Kevin Goldthwaite y, con un centro quirúrgico, encontrara completamente desmarcado a Rolfe, quien la empujó con la cabeza ante la mirada desconsolada de Conway.


Seis minutos más tarde, Mapp alargó para Mapp dentro del área y el zaguero Andrew Boyens no encontró otra forma para detener el avance que cometiendo falta. Esta vez Salazar sí decretó la pena máxima y Blanco fusiló desde los 12 pasos para el 3-0 que ya daba para pensar en una goleada.


Barrett celebró su segunda conquista de la tarde al conectar de palomita una asistencia de Mapp. La estocada final la dio Segares, luego de recibir un rechazo en la zona caliente, tras disparo de Wilman Conde.


Totalmente abatidos, los taurinos por lo menos rescataron algo de honor al minuto 74, cuando el suplente Jozy Altidore, quien curiosamente comenzó el partido desde el banco, se anticipó a todos en un tiro de esquina de Park y descontó con un fuerte cabezazo que le impidió a Busch mantener su arco en cero.


Aparte de ese pequeño consuelo, el partido fue un desastre para los Red Bulls y un severo traspié en el proyecto de Osorio para llevar la Copa MLS por primera vez a la Gran Manzana. Mientras, para el Fire, organización que nunca escondió su disgusto por la forma en que el DT colombiano se desvinculó del club, el triunfo ratificó su estatus como uno de los firmes candidatos para quedarse con la máxima gloria esta temporada.

Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.