Llegó el Partido de las Estrellas. Llegó el glamour, los nuevos retos y por supuesto, las incidencias de una cita que se torna interesante, principalmente, por el tipo de rival que van a enfrentar: el Chelsea FC, bicampeón de Inglaterra.
Este será un partido de revanchas y de muchos sentimientos encontrados. Cada uno con su tema y cada tema con lo suyo. De entrada, ya ganó la ciudad de Bridgeview, que en su primer año con estadio nuevo ya tendrá el orgullo de haber albergado a un rival de primera categoría a nivel mundial. Ya ganó la MLS, porque por primera vez tendrá en su Partido de las Estrellas a un doble campeón europeo.
Los ingleses también llegarán de estreno. El alemán Michael Ballack y el ucraniano Andryi Shevchenko fueron las últimas incorporaciones del cuadro de la Liga Premier y vienen a este país con la finalidad de mostrar el porqué de sus contrataciones. No tienen una obligación menor a la de mostrar porqué fueron elegidos por el club de autócrata por excelencia en Europa.
Eso es en el tema de los nuevos rostros. También hay de todo un poco. El "Capitán América", Landon Donovan, se quedó con la ganas de reencontrarse con el portero checo, Petr Cech, a quien no pudo hacerle daño en la Copa del Mundo ni tampoco lo hará ahora en su propia casa a causa de una lesión. La referencia del 3-0 ante la República Checa hacía que en la mente del jugador galáctico solamente existieran las ganas de vulnerar la meta de Petr.
Y si le dejó su lugar a Ricardo Clark, quizá no le dejó la misma responsabilidad. También hay razones escritas desde el oscuro mundo de las metáforas. Si no solo de pan vive el hombre, tampoco solo de sentimientos vivirá el jugador. Dwayne de Rosario todavía se pregunta como hará para evitar el choque de trenes con el francés Claude Makelele. Ambos jugadores significan lo opuesto, en medio de las similitudes de sus condiciones. A los dos les gusta meter la pierna fuerte, a los dos les gusta ir a todos los balones, aunque al canadiense le gusta hacer goles y al francés evitarlos.
La presencia de ambos jugadores en la mediacancha de sus equipos, sería lo más parecido a un corto circuito.
Y ante el gran movimiento por lesiones y compromisos en el plantel que representará a la MLS, también existen las dudas sobre la sorpresa que podrían deparar la presencia de algunos jugadores.
Fredy Adu será, ante la ausencia de Donovan, el gran representativo de lo que significa el crack "Made in USA" y entre sus principales rivales dentro del terreno de partido estaría el inglés Frank Lampard, considerado como el mejor en su posición.
Las otras elecciones del técnico Peter Nowak que incluyen a Bobby Boswell y Joshua Gros, también podrían dejarle un buen sabor de boca a esta cita que ahora ha sido más inesperada de lo normal por los constantes movimientos de jugadores.
Llegará también la posibilidad para que el candado del líder del Este, compuesto por Richard Mulrooney y Ronnie O'Brien, pueda lucirse ante el mejor equipo al que pueda enfrentarse en la actualidad. Ahí los puede esperar el holandés Arje Robben, quien es un experto cazapelotas.
Y aunque la lista de invitados a esta fiesta es limitada, lo que nadie puede contar ni limitar es precisamente el tipo de emociones que esta fiesta podría traer. ¿Y el resultado? Creo que a pocas personas les va a importar.
Cristian Echeverría es reportero del diario La Opinión de Los Ángeles. Desde 1994 es reportero de fútbol y ha trabajado para varios diarios en Guatemala y El Salvador, así como para la revista Don Balón en sus ediciones de España y México y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
