En su primera presentación de la temporada en casa, Toronto FC venció al Real Salt Lake por la mínima diferencia, dando una tremenda alegría a los más de 20 mil hinchas que repletaron el BMO Field con un lanzamiento de falta de Laurent Robert.
A los 31 minutos, el francés anotó el solitario gol del encuentro y amarró los tres puntos para un equipo que celebró dos victorias consecutivas por sólo la segunda vez en su historia.
El claro dominador durante los 45 minutos iniciales, Toronto FC, impulsado por los cánticos de su hinchada, tomó la iniciativa desde el pitazo inicial, amenazando por primera vez al arco rival con un tiro libre indirecto de Amado Guevara que Danny Dichio apenas logró peinar con la cabeza, aviso que fue contralado con facilidad por el portero Nick Rimando.
Al más puro estilo inglés, los escarlatas atacaron incansablemente por la vía aérea, tirando múltples centros al área Real, aunque sin la precisión necesaria para romper el cero que se veía cada vez menos insostenible para unos visitantes atrincherados en su zona, incapaces de cruzar la media cancha con pelota dominada, ni menos enlazar más de tres pases consecutivos.
La lesión del mediocampista Nathan Sturgis tampoco ayudó al técnico monarca Jason Kreis, quien se vio obligado a realizar su primer cambio recién a los 25 minutos, ingresando a Carey Talley para llenar el puesto vacante.
Sin forma de reaccionar, RSL recurrió al juego brusco para frenar las constantes llegadas torontianas, cometiendo 12 faltas en la primera mitad. Una de estas infracciones, la del argentino Matías Mantilla sobre Guevera cerca de la línea de cal, le costaría caro, ya que posibilitó un tiro libre en una posición inmejorable para los dueños de casa.
Tras recibir el visto bueno del árbitro Silviu Petrescu, Robert soltó un disparo raso debajo la barrera que dejó a Rimando sin opciones, un 1-0 que desató la euforía en la gradería local.
El debuntante Rohan Ricketts pudo abultar la ventaja para Toronto a diez minutos del descanso, eludiendo a dos defensores y liderando un contragolpe de cuatro contra dos. Sin embargo, a pesar de tener a un par de compañeros completamente sin marca, el inglés intentó la jugada de lujo que apenas inquietó a la zaga de RSL, dejando en nada una oportunidad de oro para sentenciar el duelo antes de ir a los vestuarios.
Anda a saber qué les habrá dicho Kreis a sus dirigidos en los camarines, porque en la segunda fracción, el Real Salt Lake fue otro equipo, generando no menos de tres tiros de esquina dentro de los primeros tres minutos del complemento.
Se invirtieron los paples en la reanudación, con los de Utah volcados en el área canadiense, mientras Toronto FC se dedicaba a aguantar el acoso al que era sometido.
Sin embargo, la agresividad de los monarcas no daría resultados tangibles, ya que les faltó precisión al momento de liquidar. Qué mejor ejemplo que el de Demo Kovalenko a los 67 minutos, instante en que marró su remate a bocajarro, pese a tener al cancerbero local Greg Sutton completamente a su merced.
Al final, Toronto FC pudo respirar tranquilo cuando Petrescu inexplicamente dio por fin las acciones tras el primer minuto del descuento aunque originalmente había ordenado que se jugaran tres minutos adicionales.
Mientras los canadienses ya se ponen a pensar en un inédito tercer triunfo al hilo frente a los Kansas City Wizards en casa, Real Salt Lake buscará olvidar sus penas en su visita al D.C. United, equipo al que aplastó 4-0 la jornda pasada.
Mark Polishuk colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
