EAST RUTHERFORD, N.J. - - Red Bulls venció por la mínima diferencia a Chicago Fire y de esa forma revivió en su esperanza de alcanzar la clasificación a la Liguilla de la temporada 2006.
El partido que se jugó ante más de 15.000 espectadores, fue disputado con muchísima intensidad, especialmente por parte del local, que del minuto uno al noventa, apretó los dientes e interpretó el encuentro como una auténtica final.
Lo más importante de destacar fue la gran actuación del juvenil delantero de Red Bulls Josmer Altidore, que luego del pase de Marvell Wynne a los 60 minutos convirtió el gol del triunfo que le permitió seguir compitiendo para un lugar en la Liguilla de la MLS. En los últimos partidos, Altidore siempre convirtió goles y el técnico Bruce Arena no se equivocó en ponerlo de titular en este partido tan importante.
"Me siento muy contento de conseguir esta victoria, reconocer el gran pase de Wynne y a su vez un poco triste por la expulsión", comentó Altidore luego del partido. "Todavía no aseguramos nada, pero no solo cuenta el gol, sino también tenemos que destacar que el equipo ha cambiado de actitud y tenemos que enfocarnos ahora en Colorado", agregó.
Nadie puede discutir que los dirigidos por Bruce Arena pusieron el alma en cada pelota dividida, aún sin encontrar el fútbol colectivo que necesitan, aún sin grandes actuaciones personales, pero de todas maneras, dispuestos a conseguir, con armas legales, pero como se pudo, los tres puntos que les dieran la posibilidad de continuar soñando con la clasificación a la ronda final.
Quizás como pocas veces antes, sería injusto destacar lucimientos personales, la mayor virtud fue la actitud de todo el plantel, más allá como siempre, de establecer que hay jugadores insustituibles a esta altura en el grupo local, el caso de Amado Guevara, que volvió a realizar un gran sacrificio en la etapa de apertura, que encontró mayor colaboración en los segundos cuarenta y cinco, donde pudo lograr un mayor destaque, donde no quedó irremediable solo para quitar, trasportar, sortear la escalonada marca rival y llegar con fuerza para definir sobre el área de Chicago Fire.
Ganó sin discusión el dueño de casa, fue el único que tuvo como exclusiva meta el conquistar el gol que le diera los tres puntos en juego y por eso se retiró del campo ovacionado por los muchos aficionados que se dieron cita en el estadio de Los Gigantes. Chicago pensó más en el resultado que en el fútbol que tantas satisfacciones le ha dado en las últimas semanas. El representante de la Ciudad de los Vientos, que se convirtió en protagonista de la Conferencia del Este, cuando en el comienzo muy pocas pensaron en él para estar entre los mejores, dejó su bien aprendido libreto en su casa, se olvidó de utilizar los espacios como en otras ocasiones, dejó de lado el desborde, para facilitar el buen trabajo que generalmente han realizado tanto Chris Rolfe como el tico Andy Herron, que esta noche no pudo repetir y terminó sustituido en el transcurso del segundo tiempo.
Ni siquiera ese toque prolijo que intentó al comienzo, de manera especial con el hondureño Iván Guerrero, jugador de talento y jerarquía, tantas veces la salida ideal de este equipo, se pudo mantener con el transcurso del encuentro. El fútbol inteligente del equipo de Sarachan, le dio paso a la pelea y en ese aspecto, sin lugar a ninguna duda, estaba mejor preparado el local, que se jugó la vida en cada pelota dividida y obtuvo, por lo menos, lo imprescindible para festejar la victoria. Hasta donde pensó en sacar un resultado y nada más el visitante, que el técnico saca del campo a Herrón en el segundo tiempo, un delantero de punta e ingresa Diego Gutiérrez, que en general, actúa de media cancha hacia atrás, mucho más defendiendo que atacando.
Desde luego que quedan dudas en Red Bulls, que las ausencias, muchas otras veces, conspiraron contra un mejor desenvolvimiento general. El panorama volvió a no ser fácil para Bruce Arena que debió prescindir lesionado de Edson Buddle y el austriaco Markus Schopp en el inicio, que tampoco tuvo a Youri Djorkaeff, pero que se las ingenió bastante bien para parar de la mejor manera el equipo en el terreno de juego.
Mientras que el entrenador local se mostró conforme con el rendimiento general y se lamentaba por la ausencia de Marvell Wynne para el próximo compromiso, al ser expulsado por doble amarilla en este encuentro, el capitán Amado Guevara expresó: "tenemos que seguir trabajando, lo de hoy fue bueno, se ganó con lo justo, pero se obtuvieron los tres puntos y ahora solo debemos pensar en el partido ante Colorado. Ya vimos que hubo que realizar un gran esfuerzo, porque nadie nos regala absolutamente nada y así debe ser, pero seguimos en carrera y para cualquier equipo será muy difícil podernos ganar".
Con la convicción que se puede todavía lograr la clasificación y muy motivado por el triunfo ante Chicago, los Red Bulls emprenden ahora el viaje a la altura de Denver, para jugarse la vida ante Colorado Rapids, que en pocas palabras podría definirse en el estadio de Los Gigantes en la última fecha de la temporada regular de la MLS.
