SALT LAKE CITY - Tras finalizar un emotivo y físico encuentro y muy a pesar del marcador final, el director técnico del Real Salt Lake Jason Kreis lucía un tanto complacido con el esfuerzo colectivo de sus jugadores una vez finalizado el primer duelo de la temporada 2008. Y es que desde el debut del equipo hace tres años, no se había presenciado un partido inaugural con tanto despliegue de dominio y buen futbol por parte de los locales.
Sí, Kreis tiene razón para sentirse orgulloso del esfuerzo de su plantel, en especial del mediocampo, pues fue precisamente en dicho sector donde el cuadro monarca mostró el arsenal de talento que posee y los resultados que se obtienen cuando dicho talento sigue las indicaciones al pie de la letra.
"Posesión y control" fueron las instrucciones del estratega a sus volantes antes de pisar la cancha sintética del Estadio Rice-Eccles. Sin embargo, ellos hicieron más que eso. Controlaron de principio a fin el ritmo del partido y dominaron el mediocampo con una versatilidad y visión ofensiva no muy común en los equipos de antaño. Lograron desequilibrar la marcación ejercida por la línea rival, lucharon con éxito las pelotas aéreas y, por sobre todo, impusieron un juego físico y tenaz impresionante.
Más hacia el final, pudiera haber razones para sentirse desalentados con el resultado. Después de todo, el joven entrenador ha presenciado numerosas ocasiones donde sus dirigidos han cometido errores en la marcación sobre el final del partido y han terminado perdiendo o empatando el juego. Sin embargo, esta vez la perspectiva fue distinta.
"Creo que los muchachos hicieron una fantástica labor. Tomaron muchas oportunidades. Y [refiriéndose a Cuauhtémoc Blanco] entonces al final es un jugador especial que hace un gol especial. No fue el resultado de fallas de nuestra parte o un gran error en el área de penal. Fue un jugador especial que hizo una jugada especial".
Sin embargo, quizás para compensar los elogios que le había tirado al Águila de Fuego, Kreis criticó la actitud del #10 rojo.
"No hizo nada más el resto del partido - excepto correr y quejarse".
No obstante las posibles fallas cometidas hacia el final del encuentro, fueron las oportunidades que no fueron aprovechadas las que en definitiva le costaron la victoria al Real Salt Lake.
"En realidad, cuando llegamos al minuto 88, debimos haber estado en ventaja por dos o tres goles", opinó el adiestrador, ya instalado en los camerines.
En verdad, los dueños de casa hicieron más que terminar el encuentro con un empate. Brindieron ánimo, esperanza y aumentaron las expectativas de este reconstruido plantel. Donde la organización, disciplina y esfuerzo resaltan y son notables a simple vista. Donde luego de sólo 90 minutos comienza a vislumbrarse un sólido engranaje de jugadores y técnicos.
"Definitivamente somos un equipo diferente al del año pasado", aseguró Andy Williams.
Hasta el Chicago Fire pudo sentir la diferencia. Por lo menos así lo expresó el curtido volante Diego Gutiérrez.
"Fue un día muy difícil para nosotros en relación a generar jugadas. La cancha no ayudó, hacía mucho viento y sabíamos que RSL iba a salir y ejercer presión desde el comienzo. Pero logramos mantener un buen resultado tras la primera mitad y al final llevarnos un importante punto a casa".
Por su parte, Blanco sólo se limitó a resaltar el espíritu luchador y guerrero del cuadro rojo.
"Un buen resultado para un gran esfuerzo como equipo. Llevarnos un punto a casa no es el mejor resultado, pero lo tomaremos".
Si bien éste no es el inicio deseado, para la monarquía es un gran paso en la dirección correcta. Ahora el resto estará en manos del cuerpo técnico para realizar los ajustes necesarios y definir la oncena titular, la cual tendrá que enfrentar como visitante a un peligroso Chivas USA la próxima semana.
Daniel Advíncula colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
