SALT LAKE CITY.- El New England Revolution logró sumar un punto tras el empate obtenido en el estadio Rice -Eccles, donde el local Real Salt Lake no pudo aprovechar las numerosas oportunidades de gol consistentemente elaboradas, en uno de los mejores partidos ofensivos jugados por la oncena Real.
La falta de definición, el rendimiento de la zaga revolucionaria y un poco de mala suerte fueron los factores determinantes para el marcador final de 0-0. Los Revs regresan a casa tras una larga jornada de visitantes y con siete partidos sin conocer el triunfo, mientras que RSL vuelve a salir del estado, esta vez para visitar al Chicago Fire y su nuevo Toyota Park tras haber pasado las últimos tres jornadas sin conseguir la victoria.
Bajo la atenta mirada de John Ellinger, quien se encontraba en las tribunas, y prestando atención a las indicaciones de Peter Mellor, quien cumplía las asignaciones como director técnico por un día, la oncena Real comenzó el encuentro a la ofensiva.
Con un 4-3-3, diseñado para acomodar al novato Atiba Harris en punta, complementando con Jason Kreis y Jeff Cunningham en el ataque, RSL inundó el mediocampo y estableció un ritmo ofensivo desde el principio. El Revolution presentó en papel un 3-5-2 más utilizó la mayor parte del encuentro a Jeff Larentowicz como defensa central, debido en gran parte a la presión ejercida por el conjunto Real.
Al minuto dos, en un inesperado desborde, el lateral izquierdo real Willis Forko logró centrar un certero pase dentro del área chica hacia Harris, quien no esperaba el balón y perdió una gran oportunidad de abrir el marcador.
Al minuto 16, New England adelantó las líneas en busca de mayor ofensiva y utilizar la posición adelantada de los delanteros del Real. La táctica resultó contraproducente, pues al minuto 16 luego de una buena jugada individual, Harris tocó en corto para Cunningham, que se encuentró a un Carey Talley desmarcado y avanzando por el medio para cederle el balón, pero el potente disparo sale raspando el travesaño de Matt Reis.
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on Kreis y Cunningham sirviendo de enganches y con los Revs jugando con la posición adelantada, RSL logra colocar móltiples balones en profundidad, que generaron desconcierto en la zaga del Revolution.
Los Revs intentaron responder por medio de José Cancela y Andy Dorman, quienes recibieron una marcación muy estrecha de la zaga Real, sin embargo al minuto 25, la más clara oportunidad de los Revs vendría cuando Pepé Cancela lanzó un preciso centro desde la derecha buscando a Taylor Twellman, el cual logró medir el salto y vencer al defensa Nelson Akwari, rematando hacia una portería desprotegida, pero su remate salió desviado.
RSL continuó manejando mejor los espacios vacios, venciendo una y otra vez la línea rival al encontrar a los defensas adelantados y fuera de posición.
Una baja que el técnico visitante Steve Nicol no esperaba recibir fue la lesión del volante checo Jani Galik, quien tuvo que ser reemplazado al minuto 30 por Danny Wynn, otro volante, pero con mayor projección ofensiva.
En el segundo tiempo, RSL continuó aplicando la presión ofensiva que mantuvo durante la primera mitad, llegando muy cerca de vencer la portería de Reis en el minuto 51 por medio de una buena combinación de Jason Kreis y Chris Klein, y en el 55 con Talley y Cunningham, pero es en el minuto 57 donde la más clara oportunidad de la segunda mitad se presentaría. Con un gran pase de Jason Kreis, Klein logró despojarse de la marcación y en el área de New Englad, tocó el esférico con el taco derecho hacia un Cunningham que no consiguió definir aún cuando el arco rival se encontraba completamente abandonado.
Los Revs decidieron entonces cambiar de estratégia y cominzaron a presionar la salida de RSL. Al minuto 60, el mediocampista Shalrie Joseph disparó un balón de media distancia que por poco sorprende a Scott Garlick, quien había estado jugando sin muchos contratiempos durante el partido.
Los Revs empezaron a cambiar el ritmo del encuentro, obligando al Real a respetar el contraataque y a ceder los espacios durante las salidas. Lochhead y Parkhurst lucieron más relajados y seguros en la marcación, y no dependiero tanto del asistente para marcar el fuera de lugar, estrategia que por poco les cuesta el partido.
Cuando RSL comienzó a verse desorganizado y falto de consistencia en el medio, se decide reemplazar a Harris con el veterano Andy Williams al minuto 72. El cambio produjo resultados inmediatos. Real Salt Lake consiguió revitalizar su ofensiva.
New England continuó elaborando oportunidades de gol, gracias al buen desempeño de Ralston y Dorman, quienes aunque tuvieron un buen primer tiempo, definitivamente mejoraron el nivel ofensivo de su club durante la segunda mitad.
Hacia el minuto 79, un perfecto pase de Andy Williams en profundidad para Cunningham logra que el delantero real enviara un potente derechazo, que pegó en el poste superior del arco de Reis, desperdiciando así la más clara oportunidad de gol de la segunda mitad.
El partido concluye con incansables esfuerzos de la oncena Real para anotar y cerrar con broche de oro lo que sería un partido bien jugado, más hacia el final, RSL lamentaría no haber capitalizado en las incontables oportunidades de gol, que no volverán y tendrán que conformarse con un empate.
Daniel Advíncula es el editor de deportes de la revista Nuestra Gente en Utah y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
