Como en el 2005, los Rapids de Colorado volvieron a llevarse el tiquete a la Final de la Conferencia del Oeste luego de vencer al FC Dallas en una nueva definición desde el punto penal. En un partido no aptó para cardiacos, el equipo visitante venció 3-2 después de 120 minutos de juego (2-1 en los 90 minutos) para igualar la serie a cuatro goles en el marcador agregado.
En la tanda de penales, los Rapids se impusieron 5-4. Pablo Mastroeni ejecutó el penalti decisivo luego que Grag Vanney y Darío Sala, por el FC Dallas, y Aitor Karanka, de los Rapids, desperdicieran sus cobros.
El primer tiempo se jugó a pura fuerza. El visitante trato por todos los medios de desarticular el mediocampo del FC Dallas, y marcó específicamente la salida en los pies de Simo Valakari y Ronnie O'Brien.
El juego se centro mucho en el mediocampo, donde no hubo equipo dominador y mucho menos un equipo dominado. El FC Dallas se acercó más a la portería de Joe Cannon y el conjunto dirigido por Fernando Clavijo tan solo tuvo una jugada de peligro en la defensa local.
El juego fuerte obligó al juez central Abiodun Okulaja a poner orden dentro del terreno de juego, advirtiendo a los 22 jugadores que cualquier jugada peligrosa la iba a castigar de manera severa. Y cumplió. A los 29 minutos de juego, Okulaja expulsó del campo de juego al defensa Chris Gbandi, por una plancha violenta sobre Matt Crawford.
Con un hombre menos, el FC Dallas pudo sobrevivir el primer tiempo. Para los segundos 45 minutos, el técnico Colin Clarke tuvo que sacrificar al delantero Abe Thompson y reforzar el mediocampo con David Wagenfuhr. En defensa, Clarke hizo un movimiento inusual al sacar a Bobby Rhine por el defensor central Clarence Goodson.
Los cambios modificaron el esquema del equipo. Ronnie O'Brien bajó a ocupar la posición de Gbandi, y Vanney marcó el sector izquierdo. La pareja de centrales pasó a hacer formada por Drew Moor y Clarence Goodson.
El primer gol del FC Dallas ocurrió al minuto 48 por medio de Carlos "Pescadito" Ruiz, quien aprovechó un balón servido por O'Brien desde el sector derecho. Ruiz recepcionó la pelota con el muslo de la pierna derecha, para luego sacar un potente disparo a media altura, que se incrustó en el palo de la mano derecha del portero Joe Cannon, quien no tuvo ninguna reacción.
A los 57 minutos, los Rapids llegaron al empate. Un balón aéreo en el área local es disputado por los defensores del FC Dallas y el delantero Nicolás Hernández, y termina cruzando la línea de gol. Goodson intentó despejar la pelota, pero el segundo juez de línea ya había divisado la anotación. Fue el 1-1.
El partido ganó en emociones con el empate. Mastroeni comienza a liderar a los Colorado Rapids, empujando a sus compañeros para poner en aprietos a la defensa local. En ataque, Mathis y Hernández se fueron con todo contra el arco de Sala.
El esfuerzo de los jugadores de Colorado Rapids se vio compensado con un nuevo gol. A los 83 minutos, el argentino Hernández aprovechó una pelota que quedó servida por su compañero Jovan Kirovski, y venció a Sala para igualar la serie y llevarla a la prórroga.
A los dos minutos de comenzar el tiempo extra, Goodson anotó el gol del empate 2-2 y puso la serie 4-3 en el marcador agregado a favor del FC Dallas. Goodson cabeceó hacia abajo del palo derecho de Cannon, la pelota había sido despachada de un tiro libre que ejecutó Greg Vanney.
Los Rapids volvieron a empatar con un gol de Mathis, pero el árbitro invalidó la acción por supuesto fuera de juego. El visitante mantuvo la presión, y fue el propio Mathis quien puso a volar a Sala con un remate de media distancia El portero argentino era el salvador del FC Dallas.
La segunda mitad del tiempo extra comenzó con mucha emoción. Colorado Rapids fue persistente y Sala seguía emergiendo como la gran figura. Los últimos diez minutos del extra tiempo fueron de mucho dramatismo porque Colorado Rapids puso en aprietos a la defensa local con los desbordes Alain Nkong y Mastroeni.
Hasta que el visitante tuvo su recompensa. Mathis tomó un rebote desde fuera del área y sacó un remante que se metió en el vértice superior izquierdo del arco de Sala. La serie se igualaba y prácticamente sentenciaba la definición desde los doce pasos.
La suerte de los penaltis favoreció a Colorado Rapids, que logró convertir en cinco ocasiones y el FC Dallas solo pudo concretar en cuatro oportunidades. Tras el cobro de Mastroeni, el fantasma del 2005 volvió a aparecer en Frisco, ante el asombro de los 15.486 aficionados que colmaron el Pizza Hut Park, y que tendrán que esperar hasta la temporada 2007 para volver a soñar con el título.
Luis Lara es Director del periódico El Sol de Texas desde 1998 además de Presidente de la Asociación Periodistas Deportivos Hispanos en Dallas y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
