COMMERCE CITY, Colorado -
Los Colorado Rapids saborearon su primer triunfo luego de 10 fechas de frustraciones y festejos a medias. No fue fácil ni bonito, pero el cuadro dirigido por Fernando Clavijo recuperó la senda de la victoria gracias a la ayuda de un autogol de Dwyane De Rosario, lo que bastó para para vencer 1-0 al Houston Dynamo en el Dick´s Sporting Goods Park.
De Rosario cabeceó un tiro de esquina en el arco propio a los 60 minutos de juego. 17 minutos más tarde, los dueños de casa se replegaron en su área luego de la expulsión del zaguero Ugo Ihemelu. Atrincherados en su propia zona, los Rapids resistieron los embates finales de los Naranjas y se llevaron los tres puntos por primera vez desde el pasado 26 de mayo cuando superaron por el mismo marcador al mismo Houston Dynamo, esta vez con un solitario tanto de Hérculez Gómez.
Desde el pitazo inicial del árbitro Terry Vaughn, se podía palpar la sensación de urgencia dentro del plantel de Colorado. El equipo salió al campo de juego a la caza de goles y controlaron las acciones durante la mayor parte de la fracción inicial. Casi todas las jugadas se desarrollaron en el sector medio a lo largo de los primeros 45 minutos de juego, pero fueron los Rapids los que generaron las oportunidades de peligro.
Pese al dominio local, fue el Dynamo el que desafió por primera vez a un arquero rival. Craig Waibel intentó de larga distancia, mandando al guardameta Bouna Coundoul dentro de su arco, pero éste impidió que el remate cruzara la línea de sentencia.
Coundoul casi tuvo que abandonar el cotejo al minuto 17. Tras un centro pasado, el portero se empleó a fondo, pegándose con el vertical derecho. Aunque salvó su meta, quedó tendido en el piso por algunos momentos pero finalmente se reincorporó, para el alivio de sus compañeros y, sobre todo, Clavijo.
Al minuto 29, los Rapids avisaron mediante Colin Clark, quien mandó un centro buscando a Jacob Peterson en plena área Naranja, pero apareció el cabezazo salvador del mediocampista Ricardo Clark para desmantelar la jugada peligrosa.
Un minuto después, Jovan Kirovski pretendió habilitar a Colin Clark tras una gran jugada de pared, pero el cancerbero visitante Pat Onstand anticipó la maniobra y salió de su zona para atenazar el balón entre sus brazos.
Colorado controlaba las acciones a su antojo, avanzando con claras embestidas por ambas bandas. Sin embargo, los centros nunca lograron conectar con sus blancos, más que debido a las intervenciones de la zaga del Dynamo, que estuvo soberbia a la hora de neutralizar en la línea final.
El volante Terry Cooke mostraba ímpetu, apareciendo por todos los sectores de la cancha. Uno de sus centros encontró Kirovski, quien gatilló de derecha, pero Onstad apareció una vez más para evitar la caída de su valla, y ambos clubes fueron al descanso con el marcador en cero.
Para el complemento, el técnico de Houston Dominic Kinnear ingresó a Corey Ashe y éste se demoró poco tiempo en hacer sentir su presencia, pisando el área rival y exigiendo a Coundoul, quien estuvo a la altura del desafío.
Unos diez minutos despés, Colin Clark gestionó un nuevo aviso con un nuevo pase elevado para Peterson, pero el remate de este último careció de dirección y pasó por encima de travesaño de Onstad.
La suerte finalmente acompañaría a los Rapids al minuto 60, cuando Onstad pateó a un pase de un compañero fuera de juego. El primer tiro de esquina de Cooke fue mandando de nuevo a fuera de juego, pero su segundo intentó llegó al corazón del área Naranja y De Rosario lo incrustó en su propio arco mediante la cabeza.
Colorado presionaba más, con una llegada de Pablo Mastroeni por el sector derecho, pero ningún colega lo acompañó en su avance y su pase cruzado no tuvo destinatario.
Al avanzar el reloj, también aumentaba el juego brusco, y Vaughn se vio obligado a mostrar la amarilla a Joseph Ngwenya y Mike Petke, tras un roce bastante hosco.
La tensión culminó a los 77 minutos, después de una barrida violenta de Ihemelu sobre Ngwenya. El colegiado no dudó en mostrar la roja directa a Ihemelu por impedir una clara opción de gol, obligando a Clavijo a insertar a Facundo Erpen para solidificar la muralla defensiva que tendría que levantar para resguardar el triunfo.
Con un hombre más, el Dynamo se puso más ambicioso, adelantando sus líneas en pos del tanto de la igualdad. Houston atacó sin misericordia al arco de Coundoul, quien resistió valientemente el bombardeo Naranja. De Rosario pudo reivindicarse a cinco minutos de final, pero su chilena no le resultó como esperaba y el tiempo acabó para el campeón.
Mientras los dueños de casa festejaron su primer triunfo en casi tres meses, el Dynamo se lamentaba su segunda derrota consecutiva.
Yuri Vásquez colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
