TORONTO - La primera visita oficial de Houston Dynamo a Canadá fue para el olvido. Jugando bajo una lluvia torrencial durante gran parte del encuentro, el campeón defensor cayó por la cuenta mínima contra Toronto FC en el BMO Field.
A pesar de haber batallado hasta en el pitazo final, los Naranjas simplemente no pudieron romper el cerrojo que puso Mo Johnston en la defensa.
El primer tiempo fue dominado ampliamente por los locales, quienes gestaron la mayoría de sus jugadas por la punta izquierda, donde Andy Welsh y Edson Buddle se las ingeniaban para poner en jaque a la defensa de Dynamo.
No obstante, parecía que el campeón venía con ganas de imponer su juego, ya que al primer minuto de juego tenía ya el primer tiro de esquina a su favor.
Al minuto 11, el portero local Greg Sutton se vio obligado a esforzarse a fondo para contener un tiro libre. Un minuto después, fue el defensa local Maruel Wynne quien salvó a Toronto casi de la línea de gol, ante una proyección por el centro del equipo visitante.
Los rojos de Toronto comenzaron a salir de su terreno y en una jugada de pared entre Edson Buddle y Maurice Edu, crearon la primera jugada de peligro en el área del Dynamo. Para fortuna del arquero Pat Onstad, el balón salió desviado por el costado.
Houston respondió abriéndose por los costados, permitiendo un mejor manejo del balón de la delantera local, y producto de esa mejor conducción de la pelota cayó el gol para Toronto.
A Andy Welsh le cometieron falta por la punta izquierda y el arbitro Terry Vaughn cobró tiro libre. El encargado de cobrarlo fue Ronnie O'Brien y, desde los 30 metros, elevó el esférico justo a la cabeza del mismo Welsh, quien venció a Onstad.
La reacción del Dynamo no se hizo esperar. Los Naranjas generaron jugadas de proyección por la banda derecha a través de Brian Ching, pero la defensa local resolvió con categoría.
Dynamo cambió de punta por la izquierda y en una de esas proyecciones Brian Mullan tuvo la oportunidad de la noche al soltar un potente disparo a boca de jarro, pero el balón se estrelló contra la humanidad de Sutton, quien mandó la pelota a tiro de esquina.
En los minutos finales de la primera mitad, Dynamo encerró a Toronto en su propia área con una amenaza constante, lo que obligó a la defensa local a defenderse con todo, y en una de esas jugadas el capitan de los rojos, Jim Brennan, se ganó la cartulina amarillo.
El campeon nuevamente salió a tratar de imponer su casta durante la complementaria y nuevamente dominó las primeras acciones. Sin embargo, los balones no encontraron la dirección correcta para terminar en el fondo de la red.
Joseph Ngwenya insistía con tiros de larga distancia, algunos desviados y otros contenidos por la defensa y el portero Sutton. En una de sus maniobras personales, Ngwenya se escapó solo con el balón y, al enfrentar a Sutton, lo colocó al otro costado, rosando el paral derecho.
El minuto 65, Mo Johnston sacó al amonestado Alecko Eskandarian por el joven Andrea Lombardo. Igual como lo hizo en su partido contra Chicago Fire, todo el equipo se replegó a defenderse, dejando en punta de lanza a Lombardo, quien explotó su velocidad y estatura para desequilibar por momentos a la defensa visitante.
Dynamo intentó entrar con balón dominado y con tiros rasantes, pero la cancha empapada con agua bendita para Toronto le negó la oportunidad de emparejar el tablero.
En su intento por empatar, Brian Mullan y Wade Barret fueron pillados en varias ocasiones en posición fuera de lugar.
Hubo tres minutos de alargue que se volvieron eternos para Toronto. Dynamo
dejó encerrado totalmente al cuadro local y a fuerza de pelotazos intentó romper
el candado. Afortunadamente para el equipo de expansión, llegaría el pitazo final de Vaughn, y Toronto sumaba su segundo triunfo y tres puntos adicionales.
Romy Hernández colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
