D.C. United logró una contundente victoria por marcador 4-1 en el debut de la temporada emelesera en el Estadio RFK. ¿Quién fue el desafortunado consignatario de la goleada?, nada menos que el Toronto FC.
Desde esa victoria hace más de un mes, junto a una sólida presentación internacional ante el Pachuca ya distante en el recuerdo capitalino, el United ha hilvanado una deplorable sucesión de derrotas, con un pequeño oasis ante el Real Salt Lake.
El club capitalino enfrenta nuevamente a su adversario canadiense en el primero de dos partidos en una sola semana, quizás no la mejor noticia para los tetracampeones, ya que el último revés escarlata fue precisamente ese inicio del torneo el pasado 5 de abril.
Toronto rescató un empate en la reciente segunda ronda de la Copa del Trilio frente al dominante Columbus Crew. La igualada extendió la fama del BMO Field como una fortaleza prácticamente impenetrable, y la racha de partidos ganados en la sede canadiense a seis, con el último revés en el 2007, colocando al conjunto canadiense en camino a establecer una marca histórica de partidos ganados consecutivos.
El club capitalino y el adiestrador Tom Soehn han expresado la necesidad urgente de un triunfo, y la exigencia de mayor energía en la línea ofensiva, fórmula que los llevó a alcanzar los pocos laureles de la temporada. El mediocampo capitalino también ha estado colmado de desaciertos y requiere mejorar el ritmo de juego.
D.C. se ha visto continuamente lento, algo muy decepcionante para un conjunto que fue rotulado como uno de los favoritos a comienzos de temporada. Una victoria ante Toronto, o, en el caso particular de esta semana, dos victorias, es lo que el onceno necesita para recuperar confianza y terreno perdido.
Los capitalinos, estancados en el sótano de la Conferencia del Este, esperan nuevamente agenciar la historia del 2007, donde se dio una situación similar y luego se retomó el ritmo victorioso.
En su último partido ante Chivas USA, D.C. United demostró mejoría, controlando la mayoría del encuentro. Aunque no se logró el resultado deseado ante un conjunto contra el cual el United nunca había sido doblegado, sí hubo momentos de inspiración que recordaron el United de antaño.
El duelo incluyó el debut profesional de Ryan Cordeiro por el ala izquierda, en sustitución del lesionado Fred, que logró marcar efectivamente al peligroso artillero rojiblanco Sacha Kljestan la mayoría del partido, demostrando su promesa como adición al plantel, aunque el estratega capitalino ha afirmado que Fred viajará a Canadá al encuentro en el BMO Field, ya que se encuentra bastante recuperado de su lesión del músculo isquiotibial.
En otro ajuste titular, el argentino Gonzalo Peralta permanece en su hogar en el norte del estado de Virginia junto a su esposa, que se encuentra embarazada y delicada de salud. Su disponibilidad aún es dudosa para el encuentro en Canadá.
Otra derrota para el United significaría registrar la mayor cantidad de partidos perdidos consecutivos desde que perdieron cinco encuentros del 12 de mayo al 9 de junio de 2001, lo que continúa haciendo que Soehn siga buscando nuevas estrategias para evitar otro fracaso.
"Vamos a reevaluarlo todo, en este momento nada está bien. Si tenemos que hacer cambios constantes, los haremos. Tenemos que reinventarnos. Ganar y perder son hábitos, y cuando pierdes una serie de partidos consecutivos te acostumbras a perder, y eso es lo que tiene que cambiar", declaró Soehn.
La esperanza capitalina yace en que Marcelo Gallardo, Jaime Moreno, Santino Quaranta y Luciano Emilio recuperen la forma que los llevó a tener la amplia eficacia ofensiva del primer partido ante la escuadra canadiense, y retomar el imprescindible camino a la victoria.
Marly Rivera es productora editorial de FutbolMLS.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
