HOUSTON.- Con la misión de defender el título de campeón de la MLS, el Houston Dynamo se alista a encarar la temporada 2007. Para los Naranjas existe el reto y la disposición de demostrar que lo logrado el año pasado es el producto de la abnegación e incansable entrega de cada uno de los jugadores a un proceso de trabajo que sabiamente sigue comandando el estratega Dominic Kinnear.
El técnico campeón está convencido de que los colores de su equipo volverán a brillar y sostiene que el éxito de sus dirigidos es el resultado de un proceso de varios años, cuyos frutos se seguirán cosechando esta temporada.
Al revisar la nómina de jugadores del Dynamo no aparecen caras nuevas, en cuanto a jugadores de experiencia se trata. Los únicos rostros desconocidos que se pueden observar son de los jugadores novatos seleccionados en el último draft que comienzan a familiarizarse con las exigencias de Kinnear.
"Contamos con una excelente base de jugadores y eso nos brinda tranquilidad para iniciar esta nueva temporada de la MLS. No hemos descartado la contratación de jugadores nuevos, pero lo queremos hacer con calma. Este equipo tiene un potencial que cada día nos sorprende más y en la competencia se podrá evaluar su capacidad para mantener el buen funcionamiento".
Cabe denotar que los actuales campeones de la Copa MLS le madrugaron a la pretemporada, lo cual le ha permitido al cuerpo técnico trabajar al detalle y fortalecer cada una de las líneas. Además, su participación en la Copa de Campeones le ha servido para alimentar sus aspiraciones de volver a hacer redoblar las campanas del éxito.
"Nos hemos caracterizado por ser un grupo compacto y unido. Todos sabemos interpretar lo que quiere el técnico de cada uno de nosotros, y lo aplicamos con entrega en el terreno de juego. Sabemos de los somos capaces de conseguir en este nuevo reto, y hemos estado trabajando duro para seguir cosechando triunfos", dijo el defensa y capitán del equipo, Wade Barrett.
La partida del defensor/volante canadiense Adrian Serioux podría considerarse lamentable, ya que fue una pieza valiosa en la obtención del título. Pero al finalizar la temporada pasada, hizo púbico su deseo de jugar por la nueva franquicia Toronto F.C. para estar cerca de su familia, y la directiva naranja le dio libertad para emigrar al club canadiense. Pero dicho vacío ha sido llenado con excelencia por el jugador Kelly Gray, un habilidoso y disciplinado zaguero con un mejor corte ofensivo, cuya estatura lo hace destacarse en el juego aéreo.
Es suficiente hacer una evaluación jugador por jugador de este equipo para darse cuenta de que las ilusiones se pueden revivir y que no son falsas expectativas. Resulta fácil valorar la versatilidad de Pat Onstad bajo los tres palos, la calidad y capacidad goleadora de un Brian Ching, el liderazgo de un Dwayne De Rosario, la precisión y voluntad de un Ricardo Clark, los destellos ofensivos de un volante como Brian Mullan y la incansable lucha de Alejandro Moreno, junto a los demás soldados que integran esta tropa de bravos guerrilleros, para pensar que otra proeza se puede cristalizar en el 2007.
Alejandro Moreno no oculta su obligación a aportar más goles al equipo y afirma que ha trabajado con ahinco para conseguir su mejor forma. "Estoy buscando ganarme la titularidad, y eso se consigue haciendo goles y asistencias, así que sólo espero que el profesor me brinde la oportunidad para hacer mi función en el terreno de juego en conjunto con el equipo", dijo el atacante venezolano.
En el interior del plantel se puede percibir la voluntad de una tropa que se alista a librar con ímpetu cada una de las batallas que se presentarán a lo largo de la competencia. De cada labio de cada jugador sólo salen frases de estímulo del uno para el otro y el optimismo reina por dondequier.
La temporada de la MLS se viene encima y los generadores de energía de Houston dicen estar listos para 'electrocutar' a todo rival que tenga la osadía de afrontarlos.
Carlos Mojica colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
