Houston Dynamo y Real Salt Lake empatan 1-1

Jeff Cunningham

SALT LAKE CITY — Demostrando postura y determinación Real Salt Lake logró rescatar un empate frente a su rival de turno, Houston Dynamo, por intermedio de un gol del volante Mehdi Ballouchy, en un partido de vida o muerte disputado frente a más de 22.000 aficionados, teniendo que esperar hasta la próxima jornada frente a Chivas USA para decidir su pase a la Liguilla.


Gracias a una gran segunda mitad de los volantes monarcas, el plantel local logró adquirir un punto más, que sumado al empate de Colorado Rapids ante New York Bulls mantiene viva las esperanzas de la clasificación.


RSL comenzó con su acostumbrado 4-4-2, mientras que Houston arrancó de manera similar con un 4-4-2 pero sin Dwayne De Rosario en el mediocampo, decisión que tomó el director técnico Dominic Kinnear para hacer descansar a su estrella.


Durante los primeros minutos del encuentro, era Houston el que tomó la iniciativa apostando al ataque liderado por Brian Ching y apoyado por Brad Davis y Brian Mullan. Hacia el minuto 14, el panorama se perfilaba peligroso para RSL, el mediocampo lucía desorganizado, y la defensa luchaba por contener los constantes desbordes de Mullan y Davis por las bandas, así como también la presión ejercida por Paul Dalglish, joven delantero en su primera temporada con el club, luego de una exitosa campaña en Escocia.


Al minuto 20, Ricardo Clarke mandó un pase hacia Dalglish quien en un buena jugada individual, picó el balón girando sobre sí mismo hacia la izquierda, venció la marcación de Willis Forko rematando un potente derechazo que sorprendió a un Scott Garlick mal posicionado para anotar el primero de la noche.


Luego del gol, la monarquía se reagrupó, con un Jeff Cunningham más adelantado sobre la punta derecha y totalmente volcado al ataque, posición que había dejado para asistir más en el mediocampo debido a la falta de apoyo y de control de balón.


Fue así como en el minuto 26, luego de un tiro de esquina, el mismo Cunningham remató de cabeza dejando parado a Onstad pero el esférico fue despejado sobre la raya por el zaguero Wade Barret, quien salvó su portería del empate.


Houston decidió mantener la presión ofensiva y aprovechar los espacios ofrecidos por el mediocampo monarca para intentar tiros de larga y media distancia, estrategia que le ha dado excelentes resultados en tantas otras oportunidades. Pero Garlick estaba preparado y se situó bien en la portería para evitar otro gol antes del medio tiempo.


Cerca del fin del primer tiempo, Real Salt Lake no consiguió implementar sus variantes, en ocasiones lento e impreciso en la recuperación, claudicando así el dominio y ritmo del partido al visitante. Los texanos pudieron haber aumentado el marcador mas no supieron aprovechar las oportunidades presentadas.


Al comenzar la segunda mitad, fue RSL quien tomó la iniciativa y adelantó sus líneas. A sólo 5 minutos de comenzada la segunda, Carey Talley consiguió en un tiro de esquina pegarle al balón pero su remate pegó en la humanidad de Cunningham, quien consiguió recuperar el esférico y rematar al arco. Fue Pat Onstad quien esta vez logró bloquear el disparo a quemarropa enviándolo a otro tiro de esquina.


Hacia el minuto 55, las acciones se desarrollaban sobre el territorio de Houston, habiendo la realeza recobrado el control del la mitad del terreno, sin embargo en un tiro libre de los hombres de naranja, y en un descuido garrafal de la defensa, Brian Ching se situó solo frente a la portería de Garlick y propinó un certero frentazo hacia la parte izquierda del guardameta que pasó desviado a pocos centímetros de arco.


Al minuto 57, John Ellinger decidió hacer ingresar al volante ofensivo Mehdi Ballouchy, para mejorar en la creación y la distribución en los tres cuartos de cancha. Su estrategia dio resultado cuando sobre el minuto 59, una buena maniobra individual, Cunningham cedió el balón al recién ingresado para que éste sacara un potente disparo que venció a Onstad a pesar de su estirada.


RSL mantuvo el ataque sobre la portería de Houston, y es así como en el minuto 64, nuevamente Ballouchy envió un pase cruzado en profundidad que fue aprovechado por Harris para que de primera rematase con la zurda hacia el arco del visitante. El portero Onstad salvó a Houston nuevamente al rechazar el disparo que tenía sabor a gol.


Real Salt Lake necesitaba el triunfo y hacia el minuto 70 dominaba completamente el mediocampo, gracias a la acertada estrategia de Ellinger al insertar a Ballouchy y al proponer mayor y mejor anticipación en la marca de los delanteros y carrileros texanos. Ante esta situación, Kinnear decidió hacer ingresar al canadiense De Rosario, en un intento por equilibrar las acciones en la mitad del terreno y darle un respiro a su ya desgastada zaga.


De Rosario hizo sentir su presencia en el encuentro, liderando el ataque con mayor consistencia y organización al mismo tiempo que conseguía hacer retroceder las líneas de la realeza por estar jugando con tres zagueros desde la entrada de Ballouchy.


Durante los últimos minutos del encuentro, ambas escuadras atacaron sin lograr concretar, terminando de esta manera un emocionante encuentro que tuvo intensidad de Liguilla y que supo cautivar a la afición de principio a fin.


Daniel Advíncula es el editor de deportes de la revista Nuestra Gente Utah y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.