CARSON, Calif. - No es fácil justificar o explicar una temporada como la que ha vivido el Los Angeles Galaxy en este 2007.
"Hicimos cosas durante la temporada para ayudar al equipo, aunque igual hay razones para explicar la situación por la que atravesamos actualmente", dijo Alexi Lalas, presidente del club que se encuentra en el fondo de la tabla general de la MLS con 18 puntos.
Además de la dirigencia, los hinchas galácticos se lo han sufrido todo este año. En vez de celebrar una seguidilla de fiestas, como la llegada del astro David Beckham y la gran despedida de su ícono Cobi Jones, por ejemplo, la afición angelina se ha resignido a observar semana tras semana el desmoronamiento de su equipo.
Puede que haya sido la lesión inesperada de Beckham o el difícil calendario, pero lo cierto es que la presente campaña ha sido un fracaso para el Galaxy.
Ahora Jones ni quiere hablar del retiro, en una señal que muchos interpretan como el deseo del veterano volante de regresar el próximo año para poder despedirse del fútbol en una nota alta.
"Muchos quieren hablar sobre si me voy o no", admitió Jones. "Yo estoy enfocado en nuestro próximo partido y no voy a decir sí o no ahora", esclareció.
Sin embargo, lo anterior también podría simplemente ser un ejemplo del profesionalismo de Jones, que no dejará de luchar para el club hasta que esté matemáticamente eliminado de la Liguilla.
En su último partido, un empate 2-2 con el Real Salt Lake, el Galaxy tuvo todos los méritos para llevarse los tres puntos desde el Estadio Rice-Eccles pero dejó escapar la victoria a cuatro minutos del final.
Cuando enfrenten a FC Dallas este domingo, los angelinos se retoparán con una cara conocida: Carlos Ruiz, actual delantero del cuadro texano que defendió la camiseta galáctica durante tres años y fue una de los grandes artífices del campeonato del 2002.
Además del "Pescadito", el Toro llegará al Home Depot Center con la estrella brasileña Denilson.
Sin Beckham, ni esperanzas de gloria, los galácticos batallarán con el FC Dallas por tres puntos vitales que tal vez les ayuden escapar del sótano.
"Estoy cansado, por supuesto", se quejó el defensor central Troy Roberts. "No es fácil cuando acabas de recuperarte de una lesión y tienes que jugar tanto. Todos mis compañeros están cansados pero no importa. Tenemos que seguir adelante".
Andrea Canales colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
