Fire y United sin pena ni gloria en la capital

WASHINGTON, D.C. - El Fire y el D.C. United salieron sin pena ni gloria del Estadio RFK tras igualar sin goles en la penúltima fecha de la temporada regular.


El resultado, que extendió a trece el número de encuentros como invicto del plantel local, alargó la agonía de Chicago, ya que el punto cosechado no fue suficiente para asegurar la clasificación a la Liguilla 2007.


Motivados por la presencia del mexicano Cuauhtémoc Blanco y el costarricense Paulo Wanchope, 25.404 aficionados acudieron al recinto capitalino para observar un partido entretenido y con buen fútbol, aunque sin el ingrediente principal: goles.


Desde el pitazo inicial del juez principal Kevin Stott, una verdadero batalla se desató sobre el terreno de juego, con avances de lado a lado siendo la tónica durante los primeros 15 minutos. Aunque ambos bandos buscaban el área rival, ninguna se arriesgó demasiado por el evidente respeto mucho que se tienen.


Los visitantes tuvieron la primera gran opción para abrir la cuenta al minuto 22, cuando Wanchope se aproximó al área local por la izquierda con uno de sus característicos avances y luego remató buscando cruzar el balón, pero éste pasó desviado del poste izquierdo de la meta de Troy Perkins.


La respuesta del United no se hizo esperar y Guy-Roland Kpene avisó con una media vuelta desde afuera del área buscando sorprender al cancerbero Matt Pickens, quien midió muy bien y la dejó salir por la raya final.


En la vuelta 26, se produjo una llegada en tres toques por parte del Fire y fue Blanco el que combinó un excelente balón desde la izquierda a Chad Barrett para que éste intentara de primera con un tiro con efecto que pasó a pocos centímetros del travesaño superior de la portería local.


La primera media hora del partido se jugó con un buen manejo del mediocampo para ambos clubes, continuas llegadas y remates, quizás con un poco más de puntería las de Chicago pero no con menos peligro las del plantel local.


Tras un enredo cerca del área capitalina, Blanco se apoderó del balón y habilitó magistralmente a Barrett cerca de la media luna, pero no menos meritoria fue la intervención de Perkins, cuyo achique dejó sin ángulo al delantero rojo y evitó la caída de su valla.


A los 39 minutos se produjo la jugada de mayor peligro por parte del United. El volante Fred avanzó por la izquierda hasta la raya final y centró al área, donde se ubicaba el argentino Christian Gómez para hacer lucir a Perkins, quien muy bien colocado y con aun mejor reflejos envió el remate del argentino a tiro de esquina.

La tónica continuó en el resto de la primera mitad, en la que si bien es cierto no hubo goles, se jugó un fútbol muy ofensivo aunque con excelentes contenciones por parte de los defensores.


Las acciones comenzaron en la segunda fracción un poco más lentas pero Chicago igual quiso hacerse de las suyas ya casi lo logró cuando Blanco una vez más dejó la pelota en bandeja servida para Barrett dentro del área, pero éste último pegó débilmente en el mano a mano a Perkins, desperdiciendo lo que parecía el 1-0 a favor del Fire.


Dos minutos después fue Chris Rolfe quien llegó desde la zona de contención para rematar de cabeza muy cerca del palo superior de la meta local.


Esas dos amenazas de gol hicieron reaccionar al D.C., que empezó a mover más el balón y a llevar peligro a la zona rival por intermedio de Gómez y Luciano Emilio.


Cumplidos ochenta minutos de juego se visualizaba que sólo una genialidad definiría el partido por la férrea marcación en la zona de volantes y la solvencia de las zagas que lideraban los porteros Perkins y Pickens.


Sobre la hora, Calen Carr dio un aviso final con un cabezazo promisorio que pasó por encima del travesaño capitalino. En la acción siguiente, Gómez remató a puerta con puntaría pero sin la fortaleza necesaria para vencer a Pickens.


No había más nada que hacer, se cumplía el período y no hubo goles en el RFK. United se mantiene invicto y Chicago alarga su agonía para la clasificación.


Miguel Guilarte es editor de deportes de El Tiempo Latino de Washington, D.C. y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.