En un partido con poco atractivo para los 20,158 aficionados que abarrotaron el BMO Field, las dos rachas ganadoras más extensas de la MLS no fueron nulificadas este sábado cuando Toronto FC y el Columbus Crew empataron por marcador de 0-0.
Ambos lados tuvieron bastantes oportunidades de anotar (seis intentos de gol para Toronto y dos para Columbus), pero el encuentro estuvo plagado de ineficiencia y oportunidades ofensivas perdidas, y preservado por la excelente labor de los cancerberos de ambas escuadras, Will Hesmer y Greg Sutton.
El Columbus Crew, líder estadístico de la Liga, gozaba de una racha de cinco partidos ganados de forma consecutiva, mientras que los canadienses poseían su propio récord de cuatro. La igualada no solo extiende dichas rachas ganadoras, sino que establece una nueva marca histórica de partidos al hilo ganados por Toronto.
El club escarlata no supo aprovechar su condición de local, y terminaron regalando un punto al cuadro pandillero, que pareció haberse salido con la suya y salir imbatible del área de los grandes lagos.
A pesar de contar con el apoyo de una inmensa afición, los canadienses no se hicieron ver como dueños de casa. A salvo de unas tres claras oportunidades que no terminaron en gol por falta de definición, los primeros 45 minutos terminaron sin pena ni gloria para el cuadro local.
Aunque Toronto fue el cuadro que siempre tuvo la iniciativa del partido, la falta de claridad en la delantera no permitió que se abriera el marcador.
Y fue precisamente el cuadro escarlata el que hizo el primer intento cuando transcurrían los primeros minutos del partido, por intermedio del francés Laurent Robert, quien quiso sorprender con un tiro desde los tres cuartos de cancha, pero el balón se fue por encima del arco defendido por Will Hesmer.
Poco después, fue el espigado escocés Danny Dichio quien le ganó en la velocidad a la defensa, pero cuando estaba a punto de hacer contacto con el balón dentro del área de sentencia, tuvo un mal rebote y terminó perdiéndose en la línea de fondo.
Un minuto más tarde fue Marvel Wynne quien desde el sector derecho hizo un centro en busca de Amado Guevara, pero la defensa supo resolver y lo envió hacia tiro de esquina.
En otra jugada de peligro en los dominios de Columbus, "El Lobo" quiso sorprender con un tiro dentro del área grande, pero el balonazo fue fácilmente controlado por el guardameta visitante, y en segunda instancia la defensa pandillera lo mandó fuera.
El equipo local parecía nervioso, entregando mal, y sin suficiente claridad para marcar, y ello obligó a la defensa a esforzarse a fondo en varias oportunidades.
Al transcurrir el encuentro en la sede canadiense, la media cancha de Toronto se fue asentando, creando mejores oportunidades, aunque siempre con problemas a la hora de definir.
De forma un poco sorprendente, fue Toronto quien se mantuvo al contragolpe ofensivo, imposibilitando la tripleta atacante de Robbie Rogers, Guillermo Barros Schelotto y Alejandro Moreno. No fue hasta el 19 que Barros Schelotto reanimó la ofensiva aurinegra, con un córner desubicado efectivamente por el mediocampista canadiense Carl Robinson.
Otro intento claro del cuadro visitante se dio al minuto 18, con un centro por la derecha de Frankie Hejduk, pero Marco Vélez respondió bien en la defensa.
Columbus intentaba crear jugadas, pero no conseguía inquietar al arquero local Gregg Sutton, quien hasta entonces era un espectador más en la cancha.
La oportunidad más clara de todo el partido para Columbus la tuvo Rogers a los 24 minutos, cuando aprovechándose de un error defensivo disparo sobre la meta de Sutton que ya estaba vencido, pero la excelente intervención de Tyrone Marshal le quitó el gol que a esas alturas hubiera caído como balde de agua fría.
El partido cayó en un una monotonía, con ambos equipos conformes por ir al descanso y replantear sus filas.
En el segundo periodo las cosas no tuvieron mayores variantes, y no fue sino hasta el minuto 58 cuando Rickets probó desde larga distancia, pero su disparo no llevaba la contundencia necesaria y el balón termino suave en las manos de Hesmer.
Poco tiempo después, en un tiro libre, el esférico quedó merodeando el área grande, y al final Marshall quiso hacer un centro, cuando todos pensaban que tiraría al arco, y así se perdió en un intento más de Toronto por abrir el marcador.
Columbus respondió con una jugada en la última línea, Schelotto para Moreno, quien se sacó un hombre, y con ángulo difícil quiso sorprender, pero el balón pasó saludando a todos para perderse en la línea de saque de meta.
Pocos minutos después, en un tiro libre de Schelotto, Rogers conectó de cabeza, pero Sutton estaba bien ubicado para evitar el peligro.
Respondiendo con más contundencia llegó Laurent Robert, quien tuvo una gran oportunidad al entrar por el centro pero el paral derecho de Hesmer le negó el ansiado gol.
A los 62, en cambio obligado en la delantera de Toronto, entró Jeff Cunningham en sustitución de Dichio, quien no tuvo mayor protagonismo en el partido.
Maurice Edu dio señales de vida a los 65, con un tiro que no hostigó a Hesmer.
En otra oportunidad perdida, Brennan se soltó desde media cancha y metió el balón al área, en donde de espaldas Cunningham no tenia ángulo y se la dio a Edu, quien sin fuerza volvió a probar al arco de Columbus, pero nuevamente sin suerte.
Columbus no se quedó atrás, y en un pase de Schelotto puso en riesgo la valla de Sutton, quien controló con dificultad un balón bien proyectado.
A los 70 un tiro de esquina fue resuelto bien por el experimentado Wynne, que de un pelotazo sacó el balón de su área.
Nuevamente a los 76 Laurent Robert se coló por la derecha, centró el balón y cuando se esperaba el balón en la red, vino el despeje bien plantado de la defensa.
Rickets tuvo el gol en sus botines, pero no supo aprovechar una jugada de trío, Cunningham para Guevara y Guevara para Rickets solo, pero su tiro fue demasiado suave.
Maurice Edu salió resentido de su pierna derecha, y entró Kevin Hamse en la media cancha, cuando el partido parecía entrar en un conformismo, luego Jarrod Smith entró por Rickets por los canadienses.
Quizás hasta ese momento la mayor parte del espectáculo se la llevaba el "Mellizo", quien en reiteradas oportunidades discutió con el referí central Kevin Stott por no haber cobrado algunas faltas que él consideraba muy claras. Con jugadas de supuestas faltas fingidas, reclamos y reacciones airadas hasta con el línea Geroge Gansner le valió al argentino la tarjeta amarilla.
Esto hizo que el técnico Sigi Schmmid se decidiera por el cambio, y en su lugar entró su compatriota Nicolás Hernández.
Y entre esas escenas de intentonas de gol, un partido por veces aburrido y un conformismo por el empate, el réferi marcó el final del encuentro, con lo cual queda en suspenso quien será el vencedor definitivo de la Copa del Trilio.
Romy Hernández colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
