FRISCO, Texas - La temporada 2007 del FC Dallas fue una verdadera montaña rusa de picos altos y bajos, sujeta a los vaivenes de la fortuna que produjeron momentos extáticos pero igualmente desmoralizadores para el Toro texano.
Tras un comienzo arrasador, incluyendo su consagración como el líder indiscutible de la Conferencia Oeste, los dirigidos por Steve Morrow repentinamente se estancaron a fines de verano. Literalmente de un día para otro, el club perdió la chispa que lo había convertido en uno de los equipos más temibles de la MLS.
Aunque a nadie dentro del FC Dallas se le entró por la cabeza que su depresión futbolística le impediría avanzar a la postemporada, pendía sobre su cabeza la amenaza de una salida prematura de la Liguilla, temor que se confirmó en la primera ronda luego de su eliminación a manos del eventual bicampeón Houston Dynamo.
Michael Hitchcock, presidente de la institución, no escondió su frustración por el desenlace de un año que había empezado tan promisoriamente para el club.
"No deberíamos ser un equipo que avanza a los playoffs y luego no puede pasar a la siguiente fase. Deberíamos ser verdaderos candidatos al título cada año", subrayó el gerente.
Según el consenso general dentro de la liga, la directiva del FC Dallas cometió un error de bulto a fines de agosto con la contratación de Denilson. A excepción de algunas jugadas de relumbrón, el atacante brasileño aportó poco y nada al ataque texano, marcando apenas un gol de penal frente a Toronto FC. De hecho, algunos van más allá y apuntan que la incorporación del ex Real Betis coincidió con el declive del equipo.
No obstante, Hitchcock tuvo una visión distinta del primer Jugador Franquicia de la historia de la organización.
"Sigo pensando que la contratación de Denilson fue buena porque incrementó la credibilidad y exposición del club", puntualizó.
Cabe señalar que los regentes del Toro texano sí acertaron con las adquisiciones de los volantes sudamericanos Juan Carlos Toja y Pablo Ricchetti. La garra y el brío del melenudo colombiano lo convirtieron en un favorito tanto de la hinchada como de los "expertos". Mientras, los años de experiencia acumulados en el medio argentino sirvieron para que Ricchetti se estableciera como un puntal del mediocampo y hasta lució la jineta de capitán en varias ocasiones.
La temporada 2007 también quedará en el recuerdo como el destape definitivo de Arturo Álvarez. El joven de apenas 22 años fue uno de los motores del ataque texano gracias a su talento y atrevimiento frente al arco contrario. Lamentablemente, el propio mediocampista empañó su gran campaña en el duelo de vuelta de las Semifinales de Conferencia frente al Dynamo con una expulsión infantil que terminó incidiendo en la eliminación de Dallas.
Todavía rumiando lo acontecido durante la larga campaña, Hitchock advirtió que algunas cosas no seguirán iguales.
"Tenemos mucho potencial futbolístico entre los jugadores de nuestra institución pero hay que hacer un fuerte llamado de atención y realizar algunos cambios internos que se darán a conocer en su debido momento".
Sin embargo, el mandamás se encargó personal y públicamente de respaldar al técnico Steve Morrow.
"Sabe manejar el grupo de jugadores. Él ha crecido como entrenador a lo largo de su primer año como técnico del FC Dallas. Ha hecho un buen trabajo".
De todo tuvo el recorrido del FC Dallas en el 2007, incluyendo numerosos roces internacionales como partidos de ida y vuelta contra Club Atlético Paranaense a comienzos de año, una nueva versión del "Plato Río Grande" ante Tigres de la UNAM y SuperLiga, todos cometidos sin frutos.
Más fructuosa resultó su participación en la Lamar Hunt U.S. Open Cup, torneo del cual llegó a las últimas instancias antes de caer en la gran final por 3-2 frente al New England Revolution.
Dentro de los momentos sobresalientes de la recién concluida campaña regular emelesera, se destacan la victoria 2-1 del 12 de abril sobre el LA Galaxy, la primera vez que el equipo sumó de a tres en el Home Depot Center, además del triunfo por el mismo resultado un mes después sobre los Kansas City Wizards que marcó el primer festejo de Dallas en el Arrowhead Stadium desde 1999.
Eso dicho, el punto alto, el momento que mejor encapsuló y ejemplificó el carácter y espíritu guerrero del grupo ocurrió el 14 de julio en el Estadio RFK frente al poderoso D.C. United. Perdiendo por tres goles a cero en pleno segundo tiempo, el Toro texano sacó lo mejor de sí para jugar los 45 minutos más brillantes de la temporada e igualar el marcador 3-3 con goles del chapín Carlos Ruiz y Toja (2), toda una hazaña que remeció la liga.
Sin embargo, el Talón de Aquiles de Steve Morrow y sus pupilos sin lugar a dudas fue el Houston Dynamo, su rival estatal que trapeó con ellos durante la campaña regular y terminó siendo su verdugo en la Liguilla. El cuadro Naranja estableció su paternidad en el estado de la Estrella Solitaria con facilidad, registrando tres victorias y un empate.
Un par de goleadas por 4-0 sufridas ante Toronto FC en el BMO Field y D.C. United en casa también dejaron a los habitantes del Pizza Hut Park al borde del abismo.
"Hicimos buenos partidos pero también tuvimos tardes que fueron desastrosas para cualquier equipo que desea llegar a ser campeón de la MLS. Lo único que puedo decir es que quedamos en deuda con los directivos y aficionados que esperaban mucho de nosotros. Ya finalizó el torneo, ahora tenemos que rescatar lo bueno que hicimos y corregir los errores cometidos", manifestó Ricchetti.
Toja, el Jugador Más Valioso de Dallas y titular en el cuadro de las Estrellas de la MLS que venció 2-0 al FC Celtic, con un tanto del cafetero, recién está asimilando todo lo que vivió durante el 2007.
"Durante el comienzo y la mitad de temporada el equipo jugó bien y ganó muchos partidos. En la última parte, tuvimos problemas y las victorias se hicieron cada vez menos frecuentes. Una vez en los playoffs, cambiamos nuestra mentalidad. Queríamos ser campeones, esa era nuestra meta. Lamentablemente no se pudo, pero así es el fútbol".
Todavía apesadumbrado por la falta de éxitos cosechados durante la temporada, según Ricchetti hay solamente una forma de recuperar su ánimo y el de sus compañeros.
"El próximo torneo debemos ser campeones. Lo podemos lograr si nos concentramos y creemos en nuestras cualidades. Creo que tenemos un buen equipo, sólo debemos corregir la falta de concentración".
Luis Lara es Director del periódico El Sol de Texas desde 1998 además de Presidente de la Asociación Periodistas Deportivos Hispanos en Dallas y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
