CARSON, Calif. (Viernes 29 de junio, 2006) — Hola amigos. Continúo con este díalogo mundialista, ahora desde nuestra sede en Carson, a donde llegué esta semana, después de concluir la aventura mundialista de nuestra Selección Nacional.
Les cuento que, tras el encuentro donde perdimos frente a Argentina, en Leipzig, regresamos a nuestra sede de Gottingen, donde tuvimos algunos días libres, antes de emprender el regreso a casa.
La verdad, fue un poco complicado encontrar vuelos de salida desde Alemania, especialmente porque, en mi caso, tenía como destino Estados Unidos. Pero luego de batallar un poco, junto a mi familia, logré encontrar lugar en una aerolínea alemana.
Mis compañeros en el equipo me han recibido con los brazos abiertos y al momento de escribir esto, ya he tenido oportunidad de tomar parte en dos entrenamientos y me siento listo para que el técnico Bob Bradley me tome en cuenta para el juego de este sábado frente al FC Dallas.
Mi compromiso es aportar toda mi experiencia para solidificar la defensa y que el equipo se mantenga en los primeros lugares.
En cuanto a la Selección Mexicana y nuestra participación en el Mundial de Alemania, personalmente me quedé con las ganas de haber participado, al menos en algún partido. Me sentía confiado en que podría hacerlo, porque en los encuentros previos al mundial, jugué siempre, incluso como titular, pero finalmente no se dio la oportunidad, principalmente, porque la línea defensiva tuvo una destacada actuación, particularmente, Carlos Salcido, Ricardo Osorio y Rafa Márquez.
En cuanto a la selección, nos quedó el mal sabor de la eliminación y el deseo de haberle dado una satisfacción mayor a nuestra afición mexicana que tanto nos apoyó, pero tenemos que reconocer que aunque se hizo un magnífico partido y un buen planteamiento táctico en el juego ante los argentinos, ellos hicieron la diferencia con ese gran gol que anotaron.
Yo no había trabajado antes con Ricardo Lavolpe y me gustó su propuesta futbolística, un estilo que recibió muchos elogios. Siento que es algo que debería tratar de mantenerse, de conservar al menos la base de esta selección.
Y si me preguntan sobre un nuevo técnico para el Tri, mi opinión es que debe ser un mexicano, que conozca el futbol nuestro. Considero que existen técnicos en nuestro país con capacidad para asumir el mando de la selección y hacer un buen trabajo, como son los casos de Hugo Sánchez, Luis Fernando Tena y José Luis Trejo, para mencionar sólo a algunos.
Por lo demás, nos falta también mejorar en ciertos aspectos administrativos para lograr competir con las potencias del mundo.
De momento, es todo. Hasta la próxima,
Claudio Suárez
