Chicago hace sufrir a los Revs en su casa

FOXBOROUGH, Mass. --

El Chicago Fire mantuvo su dominio sobre el New England Revolution en esta temporada 2008, goleando por segunda vez al subcampeón en el Gillette Stadium.


Chris Rolfe abrió la ruta hacia la victoria para el cuadro rojo, aprovechando un pase filtrado de John Thorrington y una defensa adormecida para inaugurar el marcador a los 29 minutos. Thorrington luego se inscribiría con su propio tanto poco después del descanso. A catorce minutos del final, Stephen King puso el lapidario 3-0.


Sorprendidos por los repentinos golpes de la primera fracción, los dueños de casa atacaron con todo en el complemento, aunque sin poder concretar sus pocas llegadas al arco de Jon Busch.


El elenco visitante, por su parte, se paró con firmeza en el bloque posterior y utilizó el contragolpe a la perfección.


Tomasz Frankowski (lesión) y Wilman Conde (enfermedad) se bajaron del avión rumbo a New England, dando a Thorrington la oportunidad de hacer su primera aparición de titular como mediocampista central. El DT costarricense Denis Hamlett alineó por primera vez a Rolfe y Chad Barrett en la delantera roja.


Ningún rival se arriesgó demasiado durante los primeros 20 minutos, convirtiendo al lance en un concierto de imprecisiones y malos balones.


Una vez que los jugadores del Fire lograron asociarse, no obstante, llegó el primer gol del encuentro. Era una simple cuestión de mover la pelota de izquierda a derecha. Cuauhtémoc Blanco, Logan Pause y Thorrington se conectaron con pases cortos y este último la filtró a Rolfe, quien batió al portero Matt Reis para el 1-0 parcial.


New England respondió mediante Mauricio Castro unos dos minutos después, pero el hondureño dirigió su remate directamente al estómago de Busch.


Para los Revs, no era un problema de encontrarse con el esférico, sino crear situaciones claras para nivelar la cuenta.

Chicago, por su parte, desaprovechó una clara ocasión para abultar su ventaja poco antes de ir a los vestuarios. Rolfe se descolgó por la izquierda y mandó un centro rasante al segundo poste que Barrett, quien llegó tarde a la cita con el balón, no pudo finiquitar.


Una nueva combinación entre los hombres del Fire cinco minutos después de la reanudación desembocó en una nueva celebración visitante. Rolfe aprovechó una mala salida del Revolution e inmediatamente se conectó con Blanco. El mexicano encontró a Barrett y éste la cedió de primera para Thorrington, cuyo disparo al segundo poste estableció el 2-0.


Intentando cambiarle la cara a su equipo, el DT local Steve Nicol ordenó el ingreso de Kheli Dube y Steve Ralston, quien regresaba a las canchas tras varias fechas por una lesión al hombro. Aparte de una aproximación del africano que fue rápidamente controlada por Busch, los cambios no surtieron efecto para el estratega escocés.


En cambio, Chicago insistía con su estrategia, aprovechando los espacios cedidos por el rival para pillar mal parados a los zagueros rivales. Tras deshacerse de la marca de Chris Albright, Barrett encaró y obligó la salida de Reis, quedando el balón en los pies del suplente King, quien lo empujó al fondo de la red para su primer gol en la MLS y el 3-0 definitivo.


Cerca del final, el Revolution reclamó un penal luego de una entrada fuerte de Gonzalo Segares sobre el recién ingresado Argenis Fernández, pero el colegiado Jair Marrufo ignoró las quejas de los dueños de casa, claramente abatidos por la paliza roja.


Kyle McCarthy colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.