Un año difícil, intenso y con altibajos

WASHINGTON, D.C. - El 2005 fue año intenso para el D.C. United. El equipo de la capital del país tuvo dos torneos internacionales en juego, la U.S. Open Cup, la acción de la liga con playoffs incluidos, varias lesiones, nuevas caras y una de las temporadas más exigentes, pero al mismo tiempo irregular, de la historia del club.


Fue tambien un año con altos y bajos. Con muy buenos espectáculos en el campo de juego y como suele ya ser una costumbre, con mucho apoyo de los fanáticos, que demostraron una vez más que D.C. United es de los equipos con mayor convocatoria de la MLS. Pero tambien fue un año con eliminaciones y derrotas que dejan como balance un sabor amargo por no haberse cumplido el objetivo de lograr algún torneo.
De mayor a menor


Tras la exigente pretemporada en Florida y la culminación en Washington, el D.C. United arrancó bien el año con triunfos en la Copa de Campeones de la CONCACAF. El primer rival fue el Harbour View de Jamaica, al cual el equipo dirigido por el polaco Peter Nowak, que cumplio su segundo añoo al frente del equipo, venció 2 a 1, tanto en casa como de visita.
En abril, el tetracampeón de la MLS comenzaba la décima temporada de la Major League Soccer con un importantisimo triunfo de visitante ante Chivas USA por 2 a 0. La importancia de este resultado no es solo el haberse llevado los tres puntos sino el hecho de arrancar con una victoria y fuera de casa lo que moralmente marcaba tambien un punto en favor del tetracampeón.
Pocos días despues de esa primera fecha de la MLS, llegaba tambien la segunda etapa de la Copa de Campeones. El rival en esta ocasión fueron los Pumas de la UNAM dirigidos en ese entonces por Hugo Sánchez. El primer partido en el RFK terminó igualado 1-1 y en la revancha el equipo mexicano se alzó con una muy dura goleada de 5 a 0.
A partir de allí el equipo capitalino pareció sentir el cimbronazo de esa eliminacion ya que no volvió a ganar durante ese mes de abril, acumulando tres derrotas y un empate por el torneo local. D.C. sumaba apenas cinco puntos de 15, generando preocupación.
En mayo las cosas no cambiaron mucho. La irregularidad continuó y se intercambiaron tanto triunfos como derrotas. La temporada lucía complicada y con rumbo desconocido. Sin embargo, en junio comenzó la recuperación en lo futbolístico. En las siguientes once fechas, el D.C. solo perdió dos partidos, lo cual representaba una auspiciosa reacción, que marcaba un punto de inflexión y que le permitía al equipo capitalino empezar a soñar nuevamente con llegar a la clasificación a los playoffs. Pero no todo era color de rosa. La grave de lesión del delantero Alecko Eskandarian -sufrió una conmoción cerebral el 18 de junio y se perdio el resto de la temporada- fue una baja muy sensible por los muchachos de Nowak. Eskandarian fue irremplazable para la línea de ataque del D.C., que lo extranó mucho,especialmente cuando se necesitaba más profundidad en los últimos metros y a la hora de marcar en el arco contrario.
Examen internacional, recuperación y figuras


Además de los partidos del tornero local, D.C. recibió la visita de Chelsea inglés durante el verano. El partido se jugó en el FedEx field con una gran convocatoria de casi treinta y dos mil fanáticos. El amistoso terminó con victoria del Chelsea, pero D.C. tuvo un buen partido y demostró estar a la altura de las circunstancias. La diferencia fue solo de un gol, en un buen examen que dejó a todos conformes.
Por esta epoca algunas figuras del equipo capitalino comenzaron a marcar la diferencia y su crecimiento se notaba partido a partido. Tal fue el caso del diez argentino Cristian Gómez, quien fue elegido para el Partido de las Estrellas de la MLS, y además fue quien dio la asistencia del tercer gol de su equipo a Taylor Twellman en el triunfo ante el Fulham inglés por 4 a 1.
"Gomito" fue un valor fundamental en la estructura del equipo y uno de los más mimados por los fanáticos. Otro de los más sobresalientes fue Jaime Moreno, elegido entre los mejores once en la historia de la liga, goleador del equipo y escogido también como uno de los mejores del año.
Otro destacado fue el volante Brian Carroll, que jugó un gran campeonato, muy regular y fue de menos a más en su rendimiento. Carroll fue llamado a la selección por Bruce Arena para los últimos compromisos de la selección en la eliminatoria y el amistoso en Escocia.
En agosto comenzaba la siguiente etapa de la Open Cup con una victoria ante Richmond Kickers. Al mismo tiempo los triunfos en la MLS seguían acumulándose: 3-2 contra Chicago Fire; 3-0 a Metrostars e igual marcador ante Chivas USA lo decía todo. D.C. subió en las posiciones de la Conferencia Este y estaba más cerca de la clasificacion a los playoffs. Tal vez fue el mejor momento del año por la consecutividad de triunfos. Además, el equipo se reforzó con el argentino Facundo Erpen, quien terminó jugando como último hombre y que con el correr de los partidos se fue afianzando en la zaga defensiva del D.C.
Sin embargo, en el plano futbolístico llegaría otro duro golpe para el D.C. United con la eliminación de la Open Cup a manos de FC Dallas, que se llevó el triunfo por penales. Pocas semanas después llegaría la revancha liguera ante Dallas con una victoria de 2-1 en el Pizza Hut Park.
Con muy poco tiempo de recuperación en lo anímico, llegaba la chance del segundo torneo internacional del 2005: la Copa Sudamericana, una vidriera interesante, con una chance inmejorable para mostrarse ante los ojos de Latinoamerica. En lo futbolístico representó un termómetro para conocer el nivel del equipo ante un rival exigente como la Universidad Católica de Chile. Tras un empate a un gol en el estadio RFK, la serie se definió finalmente en Santiago. La Católica se quedaría con la clasificación a cuartos de final tras un dramático encuentro. Fue 3-2 sobre el final, en una derrota que doli'o mucho porque cuando D.C. parecia que ten'ia el partido dominado, el equipo fue sorprendido en las postrimerías del encuentro y eliminado. Tal vez la falta de experiencia en algunos jugadores pudo haber atentado contra la descalificación del torneo de la CONMEBOL.
Una despedida inesperada


En octubre llegaría la recta final de la temporada regular con triunfos a Metrostars y Real Salt Lake, y un empate en casa ante Columbus. Esto le permitió a D.C. clasificar segundo en la Conferencia Este detrás de New England.
Parecía que finalmente el equipo iba a encontrar la regularidad que no tuvo en el resto del año. En los playoffs el equipo capitalino no tuvo un mal arranque. Chicago Fire fue su rival y el empate 0-0 en la Ciudad de los Vientos marcaba una leve ventaja para el partido de vuelta. En la postemporada, D.C. se reforzó con el argentino Lucio Filomeno, centrodelantero con experiencia en Europa, pero que jugó a un 50% por una lesión que arrastraba antes de llegar al club. Filomeno no tuvo la posibilidad de mostrarse en plenitud y habrá que ver que ocurre con su situacion el próximo año.
El partido de vuelta en la capital sería sorpresivo. D.C. jugó uno de sus peores partidos del 2005, y Chicago aprovechó para imponerse con un contundente 4-0. El D.C. se quedó una vez más con las manos vacías y afuera de la lucha en apenas la primera ronda. Era otra posibilidad trunca en un año difícil.
En resumen, el 2005 tuvo muchos desafíos para el D.C. United. Con picos futbolísticos altos y bajos, y con experiencias inéditas como la de competir en la Copa Sudamericana, pero sin triunfos notables ni copas que se hubieran acumulado a tantas otras en las vitrinas de la rica historia del club.
Habrá que barajar y dar de nuevo. En el 2006 seguramente llegarán los refuerzos necesarios en algunos puestos claves para arrancar con todo y lo más importante, volver a la gloria.
Gustavo Cherquis es redactor deportivo de
WZDC Telemundo 64
y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.