La llegada a los Estados Unidos del astro francés Youri Djorkaeff, abre una nueva esperanza en el equipo que lo ha contratado y sus fanáticos, pero sobre todo, le dará un nuevo impulso a una zona que mucho lo necesita. El internacional de larga trayectoria y tantos logros en su carrera, parece estar dispuesto a culminar su brillante actuación como futbolista, con un par de temporadas en Nueva York, demostrando que su fútbol está aún en plena vigencia.
Djorkaeff aceptó incorporarse a la MLS sin presión y
con muchas ganas, sin la necesidad de un dinero que ha
sido atracción para muchos anteriormente y que no ha
traído buenos resultados, aunque de ganar el
campeonato, obtendrá por supuesto una suma nada
despreciable. Pero su estabilidad económica no depende
de su presencia en el equipo. El desafío para Youri es
mostrarle a los norteamericanos que aún puede, y de
ser así, el fútbol de la Liga, habrá conseguido
quizás, a uno de sus jugadores más importantes en su
historia.
Con la presencia del francés está en juego una de las
grandes oportunidades de demostrar que vale la pena su
contratación y que con ella se puede, no solamente
ganar un torneo, sino brindarle a los aficionados el
fútbol que están esperando desde hace mucho tiempo. Su
aporte será fundamental, pero desde luego, por mejor
que Djorkaeff pueda desempeñarse, los logros no van a
depender exclusivamente de su actuación, sino de un
grupo que definitivamente deberá tomar el rumbo.
No puede discutirse que las grandes figuras son un
imán para los parciales no solo de su equipo sino del
fútbol en general y que su presencia, será un motivo
fundamental para estar presentes en el Giants Stadium
a partir del sábado 2 de abril, oportunidad en que
seguramente se producirá su debut oficial con la
casaca del conjunto gótico, enfrentando en esa
oportunidad nada menos que al Real Salt Lake, que en
su primera incursión en la Liga, venderá también muy
cara su derrota.
Convengamos que la misión de Youri no será nada fácil,
por más que haya transitado por países muy ricos
futbolísticamente hablando, Francia, Alemania,
Inglaterra, Italia, han sabido de su gran talento y de
su coronación como Campeón del Mundo, Copa de
Naciones, e innumerables torneos locales e
internacionales. Pero la MLS es otra historia y es de
esperar que el desafío llegue, en un momento en que
todavía le quedan fuerzas para enfrentar un sistema
táctico muy distante del que está acostumbrado, un
esfuerzo múltiple como el que deberá realizar y un
físico capaz de soportar el rigor de jugadores que no
serán demasiado habilidosos, pero que juegan rápido y
fuerte, aunque sin mala intención.
Youri ha manifestado haber conversado largamente con
el entrenador Bob Bradley en la visita que éste
realizara a Inglaterra meses atrás, pero no es fácil
entender la filosofía del técnico, lo que dependerá en
gran medida de la humildad con que el francés llegue
dispuesto a poner en práctica, para salir adelante y
del estado físico que mantenga, a pesar de no haber
tenido una actividad continua en los últimos meses.
Por ahora, la presencia es muy positiva, su imagen
infunde respecto y apoyo y creará una expectativa muy
particular. Hay que explicarle todavía que el fútbol
está algo lejos aún de la Capital del Mundo, que el
mundo de su equipo se desarrolla generalmente fuera de
la ciudad y que por más que las luces de la Gran
Manzana lo deslumbren, es mejor mantenerse alejado de
todo el ruido que significan sus grandes atracciones.
Me hubiera gustado escuchar que el gran sueño era
terminar su carrera en un club de la MLS y no que
Nueva York era un sueño largamente acariciado por la
familia Djorkaeff, pero tampoco podemos seguir siendo
injustos, basándonos en experiencias anteriores que no
fueron las mejores.
Hoy por hoy, Youri tiene su carta de crédito intacta y
con un buen saldo a su favor. Esperamos la gran
oportunidad de seguir pensando que vale la pena
contratar grandes estrellas, por más que estén muy
cerca del final de su carrera. Su solo nombre atraerá
un gran número de espectadores, que llegarán para
verlo jugar y es posible que se transformen en
fanáticos de su equipo. Es un momento muy particular,
la Liga crece aún con dificultades día a día, le pese
a quien le pese. En el Este la competencia de otros
deportes y de otros intereses económicos que lo ven
como un rival con gran potencia, capaz de comprometer
los enormes beneficios de grandes corporaciones, está
aún en plena vigencia, y necesitamos muchas grandes
estrellas para poder dejarlos por el camino.
La imagen de Youri será nuevamente importante para los
jóvenes, los que arrancan su actividad que lo verán
como un ejemplo, ojalá el mejor y los pequeños, que
empezarán a ver su camisa como un sueño que
acariciarán por años, esperando llegar a poder
vestirla alguna vez. Su habilidad con el balón, su
gran panorama de cancha, su fuerza anímica, su
espíritu de sacrificio, su entrega y su carisma
volverán a ser decisivos para continuar adelante.
Se abre una nueva esperanza, como antes con Guevara,
Walker y todos aquellos que han llegado a aportar en
los últimos tiempos. Los dirigentes del equipo vuelven
a realizar un gran esfuerzo, lo que siga en adelante
no es su responsabilidad, dependerá exclusivamente del
futbolista, su técnico y sus compañeros.
Llega Youri, hoy estamos todos contentos y brindamos
por él y por su fútbol. Que así sea.
Robert Sierra, compartiendo la conducción del programa "Sólo Fútbol" y en las transmisiones radiales del MetroStars por Radio WADO en Nueva York, es un periodista con años de experiencia en Uruguay y en los Estados Unidos. Si quiere hacerle algún comentario, escríbale a Sierramls@yahoo.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.