Dos auténticos triunfadores

NUEVA YORK - Los técnicos no juegan, pero convengamos que tienen una gran importancia en la formación de un equipo y más allá de lo estrictamente futbolístico, son fundamentales en la formación de un grupo humano, imprescindible para cualquier conquista del tipo que sea.


Dos claros ejemplos lo tenemos con los entrenadores del D.C. United y de Kansas City. Con un perfil bajo, sin grandes titulares, casi en silencio, sin grandes promociones ni masivos apoyos, posiblemente sin ser los que más ganan, ambos han logrado su objetivo y se encaminan como muy serios candidatos a dirigir a los finalistas de la temporada.


El caso de Bob Gansler no es nuevo. Desde hace muchos años, el técnico de los Wizards viene mostrando sus conocimientos. Fue el conductor en una oportunidad de la selección nacional de los Estados Unidos, con suerte variada, pero desde el comienzo de la Liga, ha estado ligado a un equipo que sin grandes contrataciones, ha ganado mucho más que otros, que han gastado fortunas y no han podido ganar nada. Gansler en un estudioso del fútbol, un hombre sereno y amplio conocedor de su oficio. Basta haber concurrido a algunas de las muchas clínicas que ha ofrecido en su carrera, para comprobar su ductilidad al respecto.


En la presente temporada ha llevado de la mano a su equipo a la obtención de la primera parte de la Conferencia del Oeste, trofeo de relativa importancia, pero Copa al fin, y anteriormente había ganado también la histórica Copa Abierta de los Estados Unidos, Lamar Hunt. En este momento, Kansas sorteó con éxito su primera etapa de los playoffs y definirá con el Galaxy de los Ángeles, como local, su pasaje a la final del torneo.


Bob Gansler no ha tenido en su equipo jugadores de grandes cotizaciones, sino que ha basado su juego en un excelente funcionamiento colectivo. Sus dirigidos aprendieron su libreto, aceptaron su propuesta y estuvieron convencidos de cual era la forma que debían encarar la temporada, desde el comienzo mismo del año, lo que le ha dado la solidez necesaria para estar en la definición.


Peter Nowak es un veterano en este deporte, aunque haciendo sus primeras armas como entrenador. Desde luego, que la experiencia recogida dentro del campo de juego, es una base de tremenda importancia, que difícilmente pueda ser sustituida por otros técnicos que nunca han sido parte activa e importante del fútbol.


El técnico del D.C. United debió encarar una temporada con mucha presión y poco a poco se fue afirmando y convenciendo y terminó el año no solo ganando, sino contando con el apoyo de un público acostumbrado a los grandes triunfos, difícil de convencerlos si no se está en lo alto de la clasificación general.


Nowak dispuso de un buen plantel, pero tuvo que ir puliendo el mismo, buscando entre varios aspirantes al mismo puesto, quienes eran los jugadores que mejor se adaptaban a su idea futbolística y lo ha logrado con creces. Incluso, tuvo que tomar la muy delicada decisión de dejar fuera de la cancha, al jugador de mayor promoción de toda la historia de la Liga, Freddy Adu, quien más allá de su juventud, todos querían ver como titular en el comienzo del año. Nowak lo fue ubicando en la medida de sus posibilidades, digamos que le encontró la ubicación exacta para un chico de grandes condiciones, pero que recién está haciendo sus primeras armas. Con esa actitud, le quitó presión y le dio la posibilidad de jugar en momentos en los cuales, su fútbol podía ser posible. Los resultados están a la vista, sin el peso de ser la solución, Adu cuando ha ingresado ha sido decisivo. Sus condiciones son innegables y la mano de Nowak para manejarlo, fundamental para el éxito del chico.


Tanto D.C. United como Kansas City son aspirantes muy firmes para estar el 14 de noviembre en la final de la Copa MLS 2004. Quizás el representante de Washington, parecería tenerla mucho más fácil, dado que su rival de semifinal, New England Revolution, ha tenido una actuación muy irregular a lo largo del año y tampoco desarrolló un buen nivel en la última presentación, aunque su escaso fútbol, le bastó para dejar por el camino la regularidad de Columbus, que no pudo encontrar los protagonistas necesarios para seguir en carrera.


Kansas espera al Galaxy de los Ángeles y a pesar de los recientes altibajos de los dirigidos por Steve Sampson, los californianos poseen jugadores de mucha jerarquía y experiencia, donde Carlos Ruiz parece ser la mayor cuota de esperanza para sus intereses. La gran motivación para Galaxy de poder jugar la final en su propio terreno, puede ser también un factor a tener en cuenta, pero Kansas es seguro, será un rival de enorme riesgo para la oncena de Gansler.


Más allá de que lleguen a la gran fiesta final D.C. United como Kansas, sus técnicos Peter Nowak y Bob Gansler son dos auténticos ganadores. Ambos son un ejemplo a imitar y la comprobación que con conocimientos en serio, sí se llega a los mejores resultados.


Robert Sierra, compartiendo la conducción del programa "Sólo Fútbol" y en las transmisiones radiales del MetroStars por Radio WADO en Nueva York, es un periodista con años de experiencia en Uruguay y en los Estados Unidos. Si quiere hacerle algún comentario, escríbale a Sierramls@yahoo.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.