CARSON, California (Julio 14, 2005).- Tercer Súper Clásico. Y un entorno y un escenario totalmente distinto.
Chivas USA llega con dos victorias seguidas: una ante el Real Salt Lake en la Liga y otra ante Charlotte en la Copa Lamar Hunt. El Galaxy ha perdido cuatro de sus últimas seis salidas. Las otras dos han sido empates. Es decir, dos puntos de 18 posibles.
Chivas USA rompió con la victoria sobre RSL una racha casi histórica de 13 juegos sin ganar. Después, el miércoles, los rojiblancos vencieron a Charlotte y se enfrentarán en la siguiente ronda de la Copa Lamar Hunt al Galaxy, será el tres de agosto.
Así, el tercer enfrentamiento de esta naciente rivalidad en la MLS tiene ingredientes diferentes a los dos anteriores choques.
En aquellas ocasiones, el Galaxy se alzó con la victoria de manera clara y no fue más contundente, especialmente en el primero de ellos, porque jugó con displicencia la segunda mitad.
Ahora Chivas USA ha encontrado un mejor ritmo de juego bajo el mando de Hans Westerhof quien debuta apenas en este tipo de confrontaciones.
La mejoría ha sido sustancial en funcionamiento, pero apenas el 5-1 de la semana pasada sobre el RSL puso coherencia en el marcador, aunque desató una relativa coherencia en las festividades generales por el triunfo.
Hans Westerhof desató la guerra con ansiedad esa misma noche en el vestidor: "Estamos listos para el Galaxy", dijo cuando aún no se sacudía las burbujas de la euforia. Además, Chivas USA encuentra a su rival golpeado por ausencias.
Si bien el Galaxy recuperó a Guillermo "Pando" Ramírez por la eliminación de Guatemala en la Copa de Oro, aún hay ausencias importantes: Landon Donovan, el tico Michael Umaña y del jamaiquino Tyrone Marshall, quienes forman parte de sus selecciones nacionales y que tiene compromisos este mismo sábado dentro de los cuartos de final del torneo estelar de la CONCACAF.
Chivas USA, mientras tanto, prescindirá de los servicios de su jugador emblema, como lo es Ramón Ramírez, quien está suspendido por acumulación de tarjetas amarillas.
La directiva del rebaño presentó una apelación acompañada de un video para que no sancionaran a Ramón, pero no prosperó.
Todo parece indicar que Óliver Pérez se hará cargo del sitio que deja vacante Ramón, aunque obligando a otras variantes dentro de la alineación rojiblanca.
Por otra parte, el Galaxy tiene una distracción más. Parecería que está pensando más en la fiesta del lunes que en el juego del sábado.
El lunes, los galácticos reciben la visita de otros galácticos, los merengues del Real Madrid, con sus estrellas Zidane, Ronaldo, Beckham, Raúl y demás.
Ese encuentro no significa puntos, pero significa prestigio.
Y, por si faltara algo, la apuesta está hecha. Antonio Cué y Doug Hamilton acordaron que el perdedor llevará a 50 niños a ver jugar al vencedor en su siguiente duelo, "para que sepan cómo se juega de verdad al futbol".
Además, el perdedor se vestirá con filipina, moño y demás aditamentos para comparecer como mesero o pinche (ayudante de mesero) y poner la mesa, tomarle la orden, servirle la comida, acercarle todo lo necesario y retirarle los platos... sin esperar propina a cambio.
Rafael Ramos Villagrana es redactor del diario
La Opinión
de Los Ángeles, y colabora con sus artículos en MLSnet.com. Este artículo no fue sujeto a la aprobación de la Major League Soccer o sus clubes.
